Un gatico con dos cabezas, dos bocas y tres ojos nació en Puerto Berrío (Magdalena Medio). El felino falleció hora después de su nacimiento, pero sus dueños querían conservarlo. Trataron de alimentarlo pese a que la recomendación del veterinario fue que debían aplicarle la eutanasia.
“Al gatico lo encontramos hacia las 5:00 de la mañana. Nos dimos cuenta tarde porque la gata se escondió para parir. Nosotros lo llevamos al veterinario y él nos dijo que lo mejor era hacerle la eutanasia por la cuestión de que el animalito no tendría calidad de vida y un buen desarrollo”, dijo la dueña del animal a el medio local Notivisión.
La gata –madre del gato con malformación– pertenecía a una fábrica de vidrios del municipio y, justo antes de entrar en proceso de parto, se escondió de sus dueños. El mamífero de dos cabezas nació con policefalia, condición generada por la mala formación del embrión.
“Cuando vimos el animalito nos asombramos mucho porque esto es algo que nunca se había visto en Puerto Berrío. Nació con dos boquitas, dos cabezas y tres ojitos”, puntualizó la dueña del animal.
El gatico con la malformación murió horas después de su nacimiento, pese a los esfuerzos de los dueños por tratar de alimentarlo. Los otro cinco felinos de la camada gozan de buena salud.
En enero de este año se registró un caso similar cuando en la India reportaron el nacimiento de un ternero de dos cabezas.