La bióloga Natalia Jiménez y su esposo Rodrigo Monsalve desaparecieron el pasado 20 de diciembre mientras hacían un viaje por los paisajes de la Costa Caribe para celebrar su luna de miel. Hoy fueron hallados sus cuerpos sin vida en un sector del corregimiento de Buritaca (Magdalena).
Hasta el sitio llegaron altos mandos de la Policía del Magdalena para coordinar la investigación y el traslado de los cuerpos a la morgue de Medicina Legal, en Santa Marta, y determinar las causas de sus muertes.
Al momento de la desaparición, Natalia Jiménez hablaba con su padre por teléfono, refiriéndole los pormenores de su viaje e informándole que se dirigían al corregimiento de Palomino, en La Guajira.
Eran las 5:39 de la tarde, y la conversación fue interrumpida, dijo el familiar, por un sujeto que la amenazó de muerte. El papá de Natalia contó que alcanzó a escuchar cuando un sujeto le dijo que colgara el teléfono o la mataba. Refirió que su hija gritó y la llamada se cortó en ese instante.
A raíz del hallazgo de los cuerpos, en Santa Marta se realizará hoy un consejo de seguridad para impartir directrices que conduzcan al esclarecimiento de los hechos.