El presidente de la República, Juan Manuel Santos, con el fin de frenar la deforestación en el país, autorizó la delimitación de la frontera agrícola.
De esta manera, a partir de la fecha solo el 35 % del área continental se podrá utilizar para actividades económicas relacionadas con diversos ámbitos productivos y el porcentaje restante será destinado a la conservación.
“En el 15% en parques naturales, ahí no debería haber producción agropecuaria, el 17% en los páramos, ahí no debe haber producción agropecuaria, y el 68% en zonas de reserva forestal, entonces tenemos que empezar a resolver ese conflicto”, dijo Santos.
De esta manera, en el territorio nacional quedaron disponibles 40.075.960 para uso agrícola, equivalentes al 35 %. El otro 42 % pertenecen a los bosques naturales y el 23 % restante son zonas con exclusiones legales para las comunidades protegidas.
Según el Gobierno, hasta ahora, alrededor de 2 millones de hectáreas eran usadas para actividades agrícolas en zonas de protección ambiental. Con la frontera agrícola se solucionaría dicho problema y se asegurará la protección de páramos y humedales Ramsar.
El presidente anunció que se especializarán 1200 agentes en temas ambientales, con 75 investigadores para perseguir las mafias de la deforestación.
