Ayer miércoles 19 de abril, personas en condición de discapacidad salieron a marchar en la Plaza de Bolívar de Bogotá debido a los ajustes en las tarifas del Sistema Integrado de Transporte Masivo (SITM), que en un principio tenía un descuento del 40% en 50 viajes al mes y con los cambios pasarían a tener beneficios en solo 25 viajes.
Varias personas, entre ellos niños, con movilidad reducida, dificultades en la visión y escucha, se reunieron en el emblemático lugar con pancartas y pitos para alzar su voz de protesta.
En la plaza, se encontraba un grupo del Esmad para vigilar que la manifestación no se saliera de control y así garantizar la seguridad de los ciudadanos. Sin embargo, de un momento a otro un espeso humo lacrimógeno invadió el lugar y los presentes tuvieron que ser auxiliados por quienes pasaban por ahí.
Al momento de lo ocurrido, las primeras versiones apuntaban a que a un miembro del Esmad se le había caído el gas lacrimógeno por accidente, pero gracias a vídeos de los manifestantes se pudo conocer que el artefacto fue activado sin previo aviso por el uniformado.
El General Hoover Penilla, comandante de la Policía de Bogotá expresó: “Las ultimas evidencias fílmicas dan una realidad: es un comportamiento individual de un policía, no acorde con los protocolos establecidos, ni fue ordenado dicho procedimiento. Por lo tanto, se apertura una investigación para escuchar las explicaciones de este policía referente a lo que sucedió".
Así mismo, el alcalde Enrique Peñalosa se manifestó en su cuenta de Twitter lamentando lo sucedido y prometió hacer seguimiento a la investigación de lo ocurrido.
Se estableció que uso de gases lacrimógenos en la Plaza de Bolívar no fué accidental. Lamento lo sucedido. Haré seguimiento a investigación
— Enrique Peñalosa (@EnriquePenalosa) 19 de abril de 2017
