Desde el 26 y hasta el 30 de abril próximos estarán Sara de Jesús Oviedo y Wanderlino Nogueira, vicepresidente del Comité de los Derechos del Niño de la ONU y Comisionado de ese organismo, respectivamente, quienes discutirán sobre la situación de los niños en el país.
Este Comité ya había manifestado una profunda preocupación por los altos niveles de violencia, explotación y abuso sexual, explotación laboral, condiciones de vida y utilización de menores en actos delictivos por parte de los adultos.
“El Comité insta al Estado Parte a hacer todo lo posible para reforzar la protección del derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo de los niños y las niñas”, dice el organismo en un documento con 78 observaciones para que Colombia cumpla con la garantía del cumplimiento de los derechos de los niños.
La invitación fue realizada por diferentes entidades defensoras de los derechos de la infancia, como la Alianza por la Niñez Colombiana, la Alianza de Derechos Humanos Antioquia-Minessota, la Coalición contra la Vinculación de Niños, Niñas y Jóvenes al Conflicto Armado en Colombia y el Comité de Impulso de Organizaciones de la Sociedad Civil para la Elaboración del Informe Alterno sobre Colombia.
Estas organizaciones le entregaron un informe a este Comité en el que le informaron sobre la grave situación de la población infantil y adolescente en la sociedad, para que se dé un diálogo preciso y se presenten compromisos a los representantes del Gobierno Nacional, organizaciones, sociedad civil, entes de control, Congreso y de los niños y niñas del país.
VULNERABILIDAD INFANTIL
Y es que según cifras de la ONU, el 33,98% de la población infantil se encuentra en estado de pobreza multidimensional, siendo mayoritario en la población de niños entre 3 y 5 años (36,9%) y entre 12 y 17 años (35,2%). De igual manera, un estudio de la Cepal muestra que la mitad de la población en pobreza e indigencia son niños y niñas.
En 2013, el 83% de las niñas fue víctima de violencia sexual, mientras que los niños representaron el 17%, además 69.684 niños, niñas y adolescentes fueron puestos bajo protección por situaciones que los ponían en peligro y vulneraban sus derechos.
El 30% de las siete millones de víctimas del conflicto son menores.
