Pese a la tregua que está dando el invierno, los damnificados de la localidad de Bosa en Bogotá siguen desesperados porque las ayudas que prometió el Gobierno están demoradas y porque algunos no aparecen en los censos del Distrito para poder recibir esos subsidios.La Alcaldesa de Bogotá, Clara López, afirmó que el censo de las personas damnificadas en Bogotá está levantado y que a partir de esos datos se entregarán los subsidios de 1’500.000 pesos que prometió el Presidente Juan Manuel Santos.
“El censo ya está levantado, y partir de ese censo vamos a entregar a la Presidencia de la República los nombres, las cédulas y las direcciones de los damnificados para que se entregue ese importante auxilio que necesitan las familias para recuperarse”, dijo la Alcaldesa.
Sin embargo, Javier Gamboa, uno de los damnificados del barrio el Recreo, reserva 1, aún tiene inundado el primer piso de su casa, asegura que los funcionarios del Distrito no han pasado por allí para hacer el censo y que no ha recibido ningún tipo de ayuda del Gobierno, desde el miércoles cuando amaneció con el río Bogotá bajo sus pies.
“Nos dicen que hay ayudas pero hasta el momento no han llegado”, dijo Gamboa quien luce desesperado porque el agua le daño los mubles que tenía y de paso varios enceres.
En otras regiones
La pequeña tregua que dio el invierno en Bogotá no se vivió en La Guajira donde la creciente del río Tapias ocasionó una avalancha de lodo y piedra que se llevó el laboratorio, los equipos de mantenimiento y 230 metros de la tubería de la bocatoma del acueducto de Riohacha.
En Tolima el drama se vive por el mal estado de las vías a causa del invierno.
En Caldas, dos deslizamientos de tierra, uno en la tarde y otro en la noche del viernes, causaron el cierre indefinido de la vía que conduce de Manizales a Mariquita a la altura del kilómetro 16.
El mismo problema se vive en Norte de Santander donde están en alerta roja por la alta amenaza de deslizamientos de tierra y el mal estado de las vías.
