Es un paisaje surrealista que los habitantes de Inglewood, California, no olvidarán. Se trata del paso del enorme transbordador espacial por las calles de la localidad, con paradas breves aquí o allá para orientarse rumbo a su destino final.
El Endeavour continuaba el sábado su travesía terrestre tras partir el día anterior del Aeropuerto Internacional de Los Angeles arriba de una plataforma especial de 160 ruedas, entre letreros romboidales que decían "Shuttle Xing".
Centenares de personas, muchas con cámaras fotográficas, presenciaron el lento avance de la nave de 77,1 toneladas (170.000 libras). Su cola rebasaba en altura a los semáforos y sus alas abarcaban lo ancho de una avenida.
La nave cubrirá un trayecto de 19,3 kilómetros (12 millas) a una velocidad máxima de 3,2 kilómetros (dos millas) por hora hasta su morada definitiva, el Centro de Ciencias de California, donde será la pieza principal de una nueva exposición.
El Endeavour, la nave más joven de la flota de transbordadores, reemplazó al Challenger que había estallado en 1986 tras el despegue en un suceso en el que murieron siete astronautas.
El Endeavour efectuó 25 misiones espaciales, orbitó la tierra casi 4.700 veces y acumuló un recorrido de 198 millones de kilómetros (123 millones de millas).
