La Alcaldía de Cartagena lanzó un llamado urgente al Gobierno Nacional para que autorice al Distrito a intervenir de manera inmediata un boquete en el Canal del Dique, una apertura que ha aumentado el flujo de agua y sedimentos hacia la bahía de la ciudad y que, según las autoridades, ya amenaza la operación portuaria y la navegabilidad. Así lo informó El Tiempo en una nota reciente sobre esta emergencia ambiental y logística.
Una emergencia que pasó de advertencia a realidad
La apertura, conocida localmente como “chorro” o boquete del Canal del Dique, ha dejado de ser una advertencia técnica para convertirse en un problema visible y crítico que afecta directamente la bahía de Cartagena. El alcalde Dumek Turbay Paz sostuvo que la ciudad enfrenta hoy “una realidad visible y crítica” debido a la sedimentación acelerada proveniente del río Magdalena a través del canal.
“Lo que antes era un supuesto, hoy es una realidad. La sedimentación ya está causando estragos y nos está poniendo en riesgo la operación portuaria de la ciudad”, afirmó el mandatario distrital ante la gravedad del fenómeno.
Puerto inutilizado y riesgo para la logística nacional
Entre los impactos inmediatos, las autoridades destacaron que el puerto de la Maltería, ubicado en la bahía de Cartagena, quedó fuera de operación tras los daños ocasionados por la fuerza de la corriente generada por la apertura en el Canal del Dique. La corriente impactó directamente contra el muelle, lo averió y lo dejó inutilizable, según detalló El Tiempo.
Este puerto es clave para la logística nacional, ya que por allí ingresa la cebada destinada a la producción de cerveza en Colombia. La pérdida de esta vía de acceso obliga a buscar rutas alternas para evitar interrupciones en el abastecimiento.
“Hoy tenemos un puerto inutilizado. Si no actuamos rápido, lo que ocurrió en la Maltería puede repetirse en otros muelles de la bahía, y eso sería catastrófico para Cartagena y para el país”, advirtió el alcalde Turbay Paz.
Amenaza directa a la economía
La sedimentación en la bahía de Cartagena no solo pone en riesgo instalaciones locales, sino que también constituye un problema de impacto nacional debido a la importancia estratégica de la zona portuaria.
“La operación portuaria de Cartagena no es solo un asunto local. Es un activo estratégico del país. Si se afecta, se afecta la economía nacional”, señaló el alcalde Turbay Paz en la declaración.
Según las autoridades, la acumulación de sedimentos es consecuencia de un boquete que originalmente surgió como una pequeña filtración, pero que ha crecido de tal manera que ahora funciona casi como un brazo adicional del Canal del Dique, desviado grandes volúmenes de agua y material hacía la bahía.
Recursos listos, pero falta aval
Un punto central del llamado del alcalde es que la Alcaldía de Cartagena cuenta con los recursos necesarios para intervenir y cerrar el boquete de inmediato, pero requiere la autorización del orden nacional para actuar.
“Lo que necesitamos hoy es que nos permitan hacerlo. Que ninguna autoridad nacional imponga sus competencias para impedir que el Distrito actúe en una situación de urgencia”, afirmó Turbay Paz, según reportó El Tiempo.
El alcalde lamentó que, pese a las múltiples alertas y a la declaración de emergencia medioambiental en la bahía, no haya hasta el momento un pronunciamiento claro del Gobierno Nacional que permita iniciar la intervención urgente.
“Durante meses hablamos de una amenaza. Hoy ya no es una amenaza, es un daño real. Y si no actuamos, el impacto se va a multiplicar”, concluyó Turbay Paz, enfatizando la necesidad de acción inmediata para proteger la bahía, garantizar la navegabilidad y evitar que la emergencia se convierta en una crisis portuaria de escala nacional.
Respuesta desde gestión de Riesgos ante el estado de emergencia
“Activamos el Comité de Conocimiento de Riesgos de la Oficina de Acción de Riesgos para poder atender esta emergencia”. Así lo confirmó la entidad, al detallar que se adelanta un trabajo articulado con autoridades de Magdalena, comunidades de Bolívar, Cardique y el Establecimiento Público Ambiental, con el fin de hacer monitoreo permanente y construir la ruta de intervención del boquete.
Según el reporte técnico, el boquete, que inició como una afectación menor, hoy alcanza 220 metros de largo y 40 metros de ancho, generando un alto nivel de sedimentación en la bahía de Cartagena. “Es un gran boquete que está sedimentando la bahía de Cartagena y esto todo es riesgo portuario que concedería esta situación”, advirtieron desde la Oficina de Acción de Riesgos.
La entidad aseguró que ya se encuentra lista para intervenir y ejecutar la ruta establecida: “Estamos ya prestos a intervenir, a poner en marcha la ruta que hemos establecido desde la Oficina de Acción de Riesgos”, señalaron.