Cartagena logró un repunte en la gestión de proyectos financiados con regalías al alcanzar 75,7 puntos en el Índice de Gestión de Proyectos de Regalías (IGPR) correspondiente al tercer trimestre del 2025. El Distrito señala que este es un registro que evidencia un control más riguroso, la recuperación de iniciativas estancadas y una administración que empieza a destrabar obras esperadas por la ciudadanía.
La medición, divulgada por el Departamento Nacional de Planeación, ubicó al Distrito de Cartagena en un nivel de desempeño adecuado y reflejó avances frente a evaluaciones anteriores.
El indicador examina la calidad con la que las entidades territoriales formulan, ejecutan y cierran proyectos financiados por el Sistema General de Regalías. En el caso de Cartagena, el resultado apunta a un compromiso institucional con la eficiencia, la transparencia y el cumplimiento de metas físicas y financieras, especialmente en infraestructura vial, sector que concentra la mayor inversión y tiene impacto directo en movilidad, competitividad y bienestar urbano.
La Secretaría de Infraestructura sostiene que la mejora se relaciona con la entrega de obras entre el 2024 y el 2025, y con la superación de retrasos históricos mediante una estrategia que combinó fortalecimiento financiero con recursos propios, rigor técnico y ajustes administrativos. Lea: Avanza obra que reforzará la movilidad en Puerta de Hierro
Estas acciones permitieron optimizar cronogramas, controlar costos y avanzar en procesos de cierre de proyectos. También sobresalen el seguimiento contractual más estricto con trazabilidad en GESPROY 3.0 y plataformas de contratación; la validación rigurosa de información técnica y financiera; la adopción de buenas prácticas en planeación y gestión documental para reducir riesgos de devolución de recursos; y la articulación con la Secretaría de Planeación para garantizar coherencia ante el DNP.
Vías en Cartagena construidas con apoyo de regalías
Ese esfuerzo administrativo toma forma en la reactivación y culminación de obras que cambian la movilidad de la ciudad. La vía a Nelson Mandela, deteriorada durante más de tres décadas y a la que llamaban La Trocha, es hoy una arteria pavimentada e iluminada que mejora la conexión entre el sector Las Vegas y la variante Mamonal, beneficiando a más de 400 mil personas y reduciendo cargas sobre el corredor industrial y la salida hacia Turbaco.

La vía Policarpa–Circunvalar del Sur, marcada por suspensiones y riesgos de siniestralidad, fue rediseñada e incorporó box culverts, iluminación, urbanismo y señalización gracias a inversión adicional del Distrito, fortaleciendo la comunicación entre barrios como Policarpa, Arroz Barato, Villa Hermosa y Nelson Mandela, con impacto en más de 100 mil habitantes.
La vía a la Ciudadela La Paz avanza como corredor estratégico para el oriente de la ciudad, con una conexión continua entre El Pozón, La Cordialidad y Ciudadela de la Paz hacia el Portal de Transcaribe, y con proyección de integración al futuro Corredor Verde rumbo a Tierra Baja. Le puede interesar: Obra en La Candelaria conectará la Perimetral con la Pedro Romero
En el Callejón Salas, en Olaya, se intervinieron 477 metros de pavimento rígido, andenes y un sistema de drenaje que mejora movilidad y seguridad a para 250 familias. En Pasacaballos, la calle 12 —detenida desde el 2015— fue reactivada con un kilómetro de vía, andenes y señalización, mejorando el acceso a la zona insular y la conexión hacia Barú, en beneficio de habitantes y turistas.
La calle de la Lengua, en Calamares, que arrastraba más de 20 años de deterioro y vivió dos meses de bloqueos por demandas de intervención, recibió 360 metros de pavimento rígido que devolvieron movilidad al sector. En Villa Estrella se completaron 800 metros de vía suspendida, mientras que en el Salto del Cabrón, en el cerro de La Popa, se consolidó un proceso de estabilización que beneficia al principal mirador turístico de la ciudad y a más de 8.400 habitantes de barrios como La Quinta, El Toril, La María, Lo Amador, Las Delicias, Pie de La Popa y Nariño.

La Secretaría de Infraestructura sostiene que este desempeño confirma un enfoque de ejecución responsable de los recursos del SGR, la mejora en la gestión de proyectos y la entrega de obras que buscan sostener el desarrollo urbano y reforzar la calidad de vida de los cartageneros.

