Tras más de diez años del lanzamiento del Plan 4C (Cartagena Competitiva y Compatible con el Clima), el Distrito avanza ahora en su actualización, con el fin de considerar las nuevas realidades del territorio e incluir un enfoque diferencial e inclusivo en la adaptación de la ciudad al cambio climático.
Este proceso es liderado por la Secretaría de Planeación junto a otras dependencias como la Secretaría General, la Oficina de Asuntos Ambientales y Cooperación Internacional. Además, cuenta con el acompañamiento técnico del Ministerio de Ambiente. Lea: Cambio climático: se cumplen 10 años del Plan 4C en Cartagena
El Plan Integral de Gestión del Cambio Climático Territorial (PIGCCT 4C) busca reducir la vulnerabilidad de la ciudad ante fenómenos como el aumento de las temperaturas, los cambios en los patrones de precipitación y el ascenso del nivel del mar.
Al respecto, el secretario de Planeación, Camilo Rey, destacó que esta actualización coincide con la revisión y el ajuste del Plan de Ordenamiento Territorial (POT), por lo que esta es una oportunidad para articular ambos instrumentos.
“Desde Planeación estamos trabajando para que los objetivos del Plan 4C puedan armonizarse con la etapa de formulación del POT. Entendemos que incorporar consideraciones climáticas en la planificación y gestión del territorio permitirá promover un desarrollo ambiental y territorial equilibrado, sostenible y armonioso, que garantice la protección y conservación del ambiente y contribuya a la adaptación al cambio climático”, expresó.
El proceso de actualización del Plan 4C de Cartagena
Según informó la Secretaría de Planeación, el proceso de actualización consiste en seis etapas: alistamiento, perfil territorial, análisis estratégico, plan de acción, seguimiento y evaluación, e implementación. Para este 2025, el objetivo es avanzar en las dos primeras.
El alistamiento consiste en la identificación de las acciones de cambio climático ya financiadas en el territorio, el inventario de políticas e instrumentos de planificación relacionados con la gestión climática, el establecimiento de los objetivos, y la realización de mesas de trabajo con comunidades, dependencias distritales y actores ambientales.
Por otro lado, la etapa de perfil territorial incluye una caracterización integral del territorio, análisis del clima y su variabilidad, la evaluación de las dinámicas clima-territorio y las condiciones que producen mayor vulnerabilidad y riesgo. De igual forma, se identificarán las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero y se priorizarán las necesidades y problemáticas que deben ser abordadas dentro del plan.
La Secretaría de Planeación resaltó que una de las novedades de esta actualización será la incorporación de la información sobre el aumento del nivel del mar causado por la variabilidad climática, lo que permitirá identificar con mayor precisión los elementos expuestos a este riesgo.
Además, se integrarán las últimas estimaciones de emisiones de gases de efecto invernadero desagregadas por sectores como residencial, institucional, comercial, servicios y transporte para mejorar la transparencia en la rendición de cuentas sobre acción climática y enfocar los esfuerzos en los sectores que requieren mayor intervención.
La meta es lograr la actualización del Plan 4C de tal manera que su implementación pueda comenzar durante el primer semestre del 2027.
Aliados en la actualización del Plan 4C
La Secretaría de Planeación destacó que la actualización del Plan 4C cuenta con el respaldo de aliados estratégicos. Entre ellos se encuentran la Cooperación Alemana para el Desarrollo (GIZ) a través de su programa Empleos Verdes en la Economía Circular, que aporta un enfoque de género y empleos verdes que es clave en este proceso.
Así mismo, se cuenta con el respaldo del Centro Regional de Empresas y Emprendimientos Responsables (CREER), que aporta una mirada desde los derechos humanos.