Ante la escalada de violencia que ha cobrado la vida de uniformados en distintas regiones del país, la Alcaldía de Cartagena, a través de la Secretaría del Interior y Convivencia Ciudadana, decidió suspender todos los eventos públicos programados para este fin de semana.
La medida responde a un acto de solidaridad con la Policía Nacional y en rechazo a los recientes atentados que han dejado varios agentes muertos, algunos de ellos en la capital de Bolívar.
De acuerdo con la administración distrital, la suspensión cobija todas las actividades masivas que requieren presencia y apoyo policial, como conciertos, bailes de picó y demás eventos que impliquen aglomeraciones.
“En un acto de solidaridad, y ante los recientes ataques en el país contra miembros de la Policía Nacional que enlutan a toda la nación, la Secretaría del Interior y Convivencia Ciudadana ha decidido suspender la totalidad de los eventos programados para este fin de semana”, precisó la entidad. Lea: Murió William Guardo, el policía que atacaron en una patrulla en El Líbano
La decisión fue tomada luego de una serie de hechos violentos registrados en Cartagena y otras regiones del país, en los que miembros de la fuerza pública han sido blanco de ataques armados, en su mayoría perpetrados en circunstancias que apuntan a una estrategia criminal conocida como “plan pistola”.
“Desde la Alcaldía de Cartagena expresamos nuestra solidaridad con las familias de los uniformados asesinados y reiteramos nuestro rechazo a cualquier forma de violencia”, expresó la administración.
Pese a los rumores que circularon sobre una posible implementación de toque de queda durante el fin de semana, la Secretaría del Interior desmintió dicha información, aclarando que no se aplicará esta medida, al menos por ahora.
Policías asesinados en Cartagena en el marco del “plan pistola”
En Cartagena, varios uniformados han perdido la vida recientemente en hechos que han conmocionado a la ciudadanía. Uno de los casos más recientes es el del patrullero Luis Andrés Camaño Álvarez, asesinado el lunes 28 de abril en el municipio de Sahagún, Córdoba.
Camaño, quien estaba adscrito a la Policía Metropolitana de Cartagena, se encontraba visitando a sus familiares cuando fue sorprendido por hombres armados que irrumpieron en la vivienda y le dispararon frente a su madre. El crimen ocurrió hacia las 8:20 p. m. en el barrio San Roque.
Un día después, el martes 29 de abril, se confirmó el fallecimiento del patrullero William Guardo Torres, quien había sido baleado días antes mientras conducía una patrulla en el barrio República del Líbano. Según la información oficial, el ataque ocurrió cuando Guardo y su compañero realizaban operativos en la Avenida Pedro Romero, cerca del sector conocido como Acapulco.
Cuatro hombres, a bordo de dos motocicletas, abrieron fuego contra la patrulla, impactándola en varias ocasiones. El vehículo terminó estrellado contra una vivienda, producto del ataque con armas de largo alcance.
La Alcaldía de Cartagena manifestó su postura frente a estos hechos violentos y reiteró su compromiso con el rechazo categórico a toda forma de violencia.