Durante el operativo liderado por la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria (Umata) para trasladar a más de 200 gatos callejeros desde un albergue improvisado en el sector de Los Caracoles, las autoridades encontraron una escena lamentable: restos y cadáveres de felinos en el lugar.
El hallazgo se produjo mientras funcionarios del Distrito realizaban labores de limpieza y reacondicionamiento en la zona ubicada bajo un puente peatonal, contiguo al Centro Recreativo Napoleón Perea, espacio que por años fue ocupado como refugio informal para gatos abandonados. Lea aquí: Trasladan más de 200 gatos de Los Caracoles a un centro veterinario
El sitio, que había sido objeto de múltiples denuncias por parte de la comunidad debido a los problemas sanitarios, malos olores y afectaciones al entorno, fue inspeccionado como parte de la intervención integral. Según el reporte oficial, los restos hallados evidencian el estado crítico en el que se encontraban algunos de los animales.
La situación generó conmoción entre algunos residentes del sector, quienes afirman que los gatos vivían en condiciones precarias y sin control adecuado, pese a los esfuerzos voluntarios realizados durante años.
“Al parecer, esos pobres gatos estaban sufriendo y no recibían la atención que merecían. Creo que, posiblemente, hubo negligencia”, expresó una vecina de la zona.

‘Operación Esperanza’: así fue el traslado de los gatos de Los Caracoles
Bajo el nombre de ‘Operación Esperanza’, el operativo de traslado de los felinos contó con el apoyo de más de una decena de entidades distritales y organismos de control, entre ellos la Secretaría General, el EPA, Dadis, Distriseguridad, Policía Metropolitana y las Juntas de Acción Comunal de varias zonas afectadas.
Durante el rescate, se priorizó la atención de animales en condición crítica, identificando casos de desnutrición severa, lesiones y enfermedades terminales. También se separaron gatos con conductas agresivas para un manejo especializado.
Los animales fueron trasladados al megacentro veterinario ‘El Guardián’, en Santa Rosa de Lima, donde recibirán atención médica, tratamiento, esterilización y procesos de adopción.
