Durante este domingo, en inmediaciones al puente de Las Palmas —que conecta los barrios Pie del Cerro y Manga—, la Alcaldía de Cartagena intervino una zona que por años había sido denunciada por las comunidades como foco de inseguridad.
Este lugar, densamente cubierto por mangles, era utilizado, al parecer, por consumidores de droga y como escondite de presuntos delincuentes.
De acuerdo con la Secretaría del Interior y Convivencia Ciudadana, la intervención formó parte de una toma institucional en un sector que históricamente había sido utilizado como guarida de consumidores de estupefacientes y presuntos expendedores de alucinógenos.
Según las denuncias ciudadanas, el sitio no solo era un punto también era el refugio de personas en condición de calle, algunas con problemas de salud mental y adicción, lo que representaba un riesgo permanente para la comunidad. Puede leer: Alcaldía de Cartagena recibe 9 áreas de cesión en urbanismo
“Era una olla disfrazada entre la maleza”: Bruno Hernández
Bruno Hernández, secretario del Interior y Convivencia Ciudadana, explicó que esta acción se enmarca dentro de una estrategia integral para mejorar la percepción de seguridad en zonas críticas de la ciudad.
“Hace meses venimos haciendo intervenciones en este sector por los altos índices de consumo y hechos delictivos. Había una olla, una caleta, donde incluso se vendían alucinógenos. Lo que hicimos fue una intervención drástica, pero técnica, con respeto al medio ambiente. Ya no hay maleza para esconderse ni espacio propicio para actos delictivos”, señaló Hernández.
Según el funcionario, el siguiente paso será reforzar la vigilancia en la zona con apoyo de la Policía Metropolitana, que se comprometió a incrementar los patrullajes. También puede leer: ¿Cómo va la Central Semafórica de Cartagena? Aquí le contamos
“Con la maleza despejada, el terreno ya no será visto como escondite. Esta recuperación va de la mano con acciones permanentes de control para evitar la reocupación ilegal”, aseguró el secretario.
Proyección ambiental: centro de logística y arborización
Por su parte, Haroldo Rodríguez, director de la Fundación Verde que te quiero verde, destacó que la intervención no solo busca mitigar problemáticas de seguridad, sino también aportar a la sostenibilidad ambiental y la recuperación del espacio urbano.
“Este espacio será dividido en dos áreas: una parte quedará proyectada para futuras obras viales, mientras que la otra se convertirá en un centro de logística ambiental que nos permitirá tener control del territorio desde una perspectiva ecológica”, indicó Rodríguez.
Según el líder ambientalista, el centro permitirá almacenar herramientas, insumos, plantas y árboles que servirán para mantener las nuevas ornamentaciones de la Avenida del Lago, una de las zonas priorizadas por la Alcaldía para su embellecimiento urbano.
“Vamos a tener stock de árboles, sistemas de riego y todo lo necesario para darle continuidad al proceso de recuperación paisajística. La comunidad está contenta porque esto responde a la primera solicitud del pliego de peticiones que presentaron en el reciente consejo comunitario con el alcalde”, concluyó Rodríguez.