En lengua nativa ‘Furas’ significa ‘mujer’, no hay mejor palabra para nombrar a este proyecto, que por medio de diversas estrategias ayuda a empoderar a las mujeres emprendedoras de la ciudad.
Pico y placa en Cartagena del 16 de junio de 2025
REDACCIÓN CARTAGENAPaula Giraldo es la creadora de esta red de apoyo que busca sembrar una semilla para el cambio social. “Todo lo que aprendí de emprendimientos no se podía quedar ahí, yo quería devolverlo a otras mujeres, a esas que no se puedan mover, que les cueste tomar un bus, que tengan niños, decidí ir a los barrios a capacitarlas y apoyarlas a forjar un mejor futuro”, explicó.
La fundadora de esta iniciativa estudio Cine y Televisión, pero sabía que lo que más deseaba es trabajar para la sociedad.
Entonces de la manera más inesperada la vida la encamino hacia su mejor vocación. Debido a una incapacidad que la mantuvo en cama durante un mes, cambió su vida, dedicó ese tiempo a leer, escribir y aprender sobre emprendimientos, con el fin de ir a enseñarles a las mujeres que necesitaban estos conocimientos.
“Yo quería brindarles a ellas las herramientas para generar sus propios ingresos y para cambiar el rumbo de su vida”, destacó la fundadora de la red de apoyo.
La labor social de Furas
Furas ha capacitado a más de 200 mujeres y actualmente apoya a más de 30 emprendedoras. Esta iniciativa trabaja con mujeres en zonas vulnerables, que tienen grandes ideas de emprendimientos y pocos recursos. Realizan eventos y capacitaciones que brindan a las emprendedoras las herramientas necesarias para potencializar sus negocios.
“Tenemos varias áreas, entre ellas, confección, gastronomía, accesorios y turismo”, enumera la fundadora.
El turismo es una de las áreas a las que le apuestan, Paula quería una propuesta distinta, así que diseñó unas experiencias gastronómicas en los barrios populares de Cartagena, para mostrar a los turistas otra cara de la ciudad.
“Estamos mostrando una cara que no es ni Castillogrande, ni Bocagrande, y tampoco prostitución o drogas; sino la cara de gente que trabaja en barrios, los llevamos allá y hacemos actividades con ellos, eso ha sido un éxito”, explica la fundadora.
Furas cambiando realidades
Diana Mercado es una de las mujeres que hacen parte de esta red. Se enteró por medio de vecinas de la comunidad que Furas llegaría a su barrio y corrió a hacer parte de esta iniciativa. Su emprendimiento es de catálogos y accesorios para celulares, en aproximados siete meses ha visto cambios notables en su negocio.
“Paula esta muy pendiente a nosotras y el proyecto super bueno, hace poco hicimos un taller en el que siento que conecte con mi ser interior, aveces uno en la casa no puede hacer eso porque esta en varias cosas al tiempo, pero venimos acá y logramos relajarnos y aprender”, resaltó la emprendedora.
Furas dividió mi vida en dos”
Viviana Legarda, mujer emprendedora de Furas
Así mismo, Viviana Legarda otra de las emprendedoras que hacen parte de esta red siente que Furas dividió su vida en dos. Desde hace más de diez años empezó su negocio de fritos en el barrio Blas de lezo, pero aseguró que desde que se unió a Furas su negocio despegó.
“Encontré fortalezas en mi que no sabia que tenia, este lugar me ha ayudado a crecer de muchas maneras”, expresó Viviana.
Taller con Caribe Afirmativo para romper estereotipos de genero
Gracias a una alianza con Caribe Alternativo, el jueves 6 de marzo las mujeres de Furas recibieron un taller en la Biblioteca Puntilla del barrio Olaya Herrera con el objetivo de romper los estereotipos de genero que existen en la ciudad.
“Fue un gran espacio, recordamos la importancia de respetar las diferencias y decisiones de las personas”, comentó Geisy Herrera una de las asistentes a este taller que cuenta con un emprendimiento de gelatinas.
Durante toda esa semana se estuvieron reuniendo en diversos encuentros gastronómicos, conversatorios y recibiendo herramientas para sus emprendimientos y su empoderamiento como mujeres.
Incluso recibieron la visita extranjera de unos estudiantes de la Universidad Vanderbilt. La entidad seleccionó a Furas para enviar a sus estudiantes en el marco de un proyecto de consultoría pro bono que busca involucrar a los estudiantes de posgrado en el alivio de la pobreza mediante asociaciones con organizaciones locales y globales.
Los estudiantes estuvieron acompañando a Furas en la primera semana de marzo, brindando estrategias , nuevas perspectivas, análisis de datos y recomendaciones mientras la red de apoyo les agradecía involucrándolos en la ruta de turismo diferente a la que le apuestan.
“Ellos estaban felices con todas las actividades”, afirmó Paula Giraldo.
Furas quiere seguir apoyando mujeres
La fundadora del proyecto destacó dos grandes desafíos con los que viene luchando desde el principio del proyecto: El machismo y la financiación. “Muchas veces llamamos a la señora emprendedora y contesta su marido, en ocasiones vienen hasta acá solo ha revisar que es lo que hacemos y ni hablar de los comentarios y prejuicios que siguen en la sociedad”, relató Giraldo.
Las mujeres emprendedoras en Furas han aprendido a lidiar con los comentarios machistas que se han normalizado en su vida diaria.
En cuanto a la financiación la mayoría de los ingresos que tiene esta iniciativa salen de un emprendimiento de helados de paila de su fundadora y la venta de pines, camisetas y otros productos de la red. Furas aprovechó para hacer un llamado a donantes que quieran apoyar a esta iniciativa a comunicarse con ellas, de igual forma, Furas tiene las puertas abiertas para voluntarios que quieran ayudar en este proyecto, los únicos requisitos son que cuenten con disponibilidad de tiempo y compromiso.