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Cartagena

Joven cartagenera denuncia agresión y amenaza de sus exjefes

La comunicadora social Raquel Cáceres denuncia que fue agredida físicamente por el dueño de la empresa. También acusa a su jefe directo.

Joven cartagenera denuncia agresión y amenaza de sus exjefes

Joven cartagenera denuncia agresión y amenaza en la empresa donde laboraba. // Foto: Ilustración.

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Una comunicadora social cartagenera denuncia haber sido víctima de agresiones físicas, amenazas y de un despido injustificado por parte de sus exjefes en la empresa Elite Apartaments, ubicada en Bocagrande. El Universal se contactó con el gerente general de la compañía y con la gerente de Recursos Humanos, pero no quisieron dar declaraciones al respecto.

La joven denunciante se llama Raquel Cáceres Narváez, tiene 24 años y cuenta que se dirigía a su trabajo de manera habitual, el pasado 7 de enero.

Raquel, quien se desempeñaba como asistente de marketing en la empresa Elite Apartments, explica que cuando iba a su trabajo, para ingresar a las 8 a. m. (como lo solía hacer desde hace un año y 18 días, tiempo que llevaba laborando), el dueño de la compañía se encontraba sentado en un lugar del parqueadero y, cuando vio que ella iba ingresando, se levantó y se le acercó. La joven asegura que se trata de un hombre extranjero que mide 1,90 m y la miraba finamente.

“Me percaté de que él me estaba esperando ahí, en ese parqueadero y me abordó en un pasillo. Los demás (compañeros de trabajo) no podían ver lo que pasaba allí porque, hasta donde tengo entendido, no hay cámaras cerca de esa zona”, indicó la denunciante. Lea también: Acoso laboral a migrantes: ¿Cómo denunciarlo?

“Cuando llegó hasta donde mí, en medio del parqueadero, me pidió con señas que me quitara los audífonos. Y cuando yo guardé mi celular, me dijo que ya no podía seguir trabajando con ellos; yo le dije que eso constituía un despido sin justa causa, a lo que él me respondió que me pagaba lo que sea necesario y que no le importaba”, señaló.

Y agregó: “Acepté su solicitud, le comenté que me gustaría terminar todo bien, por escrito, así como cuando firmé un contrato, con las condiciones de que me pagaran liquidación e indemnización. Luego me dijo que le sorprendía mi actitud, a lo que yo le respondí que soy profesional y que me rijo bajo la ley. Después me dijo que no le importaba la ley... Él piensa que yo soy una rebelde que incitaba a mis compañeros a presentar sus quejas”.

Raquel dijo que el dueño le recalcó que su despido era porque “no encajaba con sus intereses”. “En medio de esa conversación, hasta ese momento, ni él ni yo mostrábamos mala actitud, a pesar de él ser conocido por su actitud temperamental, grosera y violenta. Yo le pedí que me dejara buscar mis cosas (dos libretas y un cojín pequeño), pero me respondió que no iba a entrar, que uno de los dos secuaces que lo acompañaban (se refiere a otros trabajadores) iba a buscar mis pertenencias, yo le pregunté que por qué no podía hacerlo yo misma, a lo que él cambió de actitud, diciendo que esa es su propiedad”, resaltó.

Y añadió: “Varias veces, durante la conversación, me preguntaba si yo estaba grabando, ya que veía que yo buscaba mi celular, esto debido a que justo en ese momento mi hermana me estaba llamando, y yo intentaba colgar la llamada, pero justo cuando él se tornó repentinamente agresivo, yo contesté, le di en grabar y guardé mi teléfono pensando que mi hermana estaba escuchando y grabando todo. Inesperadamente, él se me acercó a la cara y me señaló diciendo ‘Don´t fuck with me’ (No juegues conmigo), mientras que yo le respondía en inglés “I´m not fucking with you, please, put your finger out of my face” (No estoy jugando contigo, por favor, quita tu dedo de mi cara), y él me contestó en español que no lo empuje, lo cuál me pareció raro, ya que yo sólo me alejé porque él se acercó mucho a mi cara. De repente, él me violentó, empujándome por el cuello y la cabeza de forma abrupta contra una pared del lado izquierdo del parqueadero, y empieza a maltratarme y a decirme en inglés y español que me fuera, que iba a llamar a la Policía. Yo no entendía por qué todo se había tornado tan violento, porque yo insistí más de dos veces en nuestra conversación, terminar bien las cosas”.

La joven cartagenera denuncia posible maltrato en la empresa donde laboraba. // Cortesía.
La joven cartagenera denuncia posible maltrato en la empresa donde laboraba. // Cortesía.
La joven cartagenera denuncia un presunto maltrato físico en la empresa donde laboraba. // Cortesía.
La joven cartagenera denuncia un presunto maltrato físico en la empresa donde laboraba. // Cortesía.

La sensación de estar sola durante el suceso

Raquel resaltó que, durante el suceso, los otros trabajadores de la compañía no hicieron nada por evitar que el dueño de la empresa la siguiera maltratando de forma física.

“Durante el incidente, mi jefe, Luis Valderrama, estaba viendo todo desde la ventana de su oficina que da vista al parqueadero. Mientras Naor me violentaba, yo pedía a mi hermana que llamara a alguien, pensando que aún seguía en llamada, ya que me estaba pegando. No contento con eso, él se alejó (el dueño) y me siguió gritando que me fuera, que no lo jodiera, que no me metiera con él, porque yo no sabía de lo que él era capaz. Durante la conversación, mencionó tres veces que él podía llegar a ser más malo de lo que los demás pensaban si se metían con él (lo que supone una amenaza)”, relató Raquel.

Asegura que durante el ataque, el agresor le arrebató su teléfono celular y lo destruyó, eliminando así posibles pruebas de lo sucedido.

Inmediatamente, ella logró subir y hablar con sus compañeros y empezó a contarles el hecho. Al rato, se acercó el gerente, junto al dueño, hacia donde Raquel. “Yo, pensando que Luis iba a ser mediador, le hablé a él para pedirle ayuda, para que calmara a Naor, pero él no me permitió terminar de hablar cuando con todas las fuerzas que tenía se me acercó a la cara y me violentó verbalmente y gritando: ‘Lárgate, nadie te quiere aquí'; yo quedé pasmada y paralizada. Luis comenzó a grabar que yo estaba en propiedad privada, pero yo en el video solo salgo llorando implorando por mi celular”, contó.

Posteriormente, llegaron cuatro agentes de la Policía, quienes, dice ella, primero hablaron con Naor y con Luis. “No quiero afirmar nada, pero todos sabemos que pudo haber un acuerdo entre los agentes y los dos abusadores. Cuando llegaron los cuatro hombres a sacarme, yo les dije que sólo quería mi celular, pero Naor afirmó que él no sabía nada, que yo me puse loca. La Policía me dijo que Naor tenía rasguños, afirmando que lo empujé; sin embargo, les muestro mis moretones y rasguños, les digo que él (Naor) fue quien me violentó, me empujó contra una pared y que todo fue sin que nadie viera... pude haber muerto”, sostuvo.

Carta Formal a Dt Rafael Pa... by espriellaperezesteban

La joven cartagenera y sus antecedentes con la empresa

Raquel dijo que el 27 de diciembre de 2024 firmó su contrato a término indefinido con Elite Apartments. En diciembre de 2024, pidió sus vacaciones más unos días de fin de año para trabajar en remoto o sin remuneración alguna.

“Al haber tantas trabas y no conciliación con mi exjefe (Luis) y recursos humanos, de repente él me grita (cosa que en todo un año de trabajo que estuve ahí nunca hizo), tomando una actitud muy grosera conmigo. Ese mismo día, yo presenté una queja formal narrando los hechos con el fin de generar una mejor convivencia y que se mantuviera la línea profesional. También mencioné las situaciones de salud e infraestructura como recordatorio del pago de obligaciones del empleador, haciendo citación a los artículos que corresponden, con el fin de que todo fuera organizado y profesional”, narró.

Al final, contó que nunca tuvo respuesta de los correos enviados. “El pasado 30 de diciembre, trabajé en remoto, por lo que le pedí a mis compañeros de oficina que prendieran mi computador; pero ellos me comunicaron que el aparato no estaba. Yo dije que esto nunca fue comunicado por mi ex jefe. Luego, yo le escribí a Luis: ¿Dónde está mi computado?, a lo que él me respondió que en la primera oficina en la que estuve y alegó que la razón del cambio repentino era porque se iba a volver a usar esa oficina.

Realmente la intención era dejarme sola, alejarme de mis compañeros, esto lo rectifiqué el día en que Naor, antes de violentarme, me dijera que me despedía porque no necesitaba que influenciara a mis compañeros con artículos ni leyes”.

 Raquel Cáceres Narváez, joven denunciante

Y agregó: “Ese día remoto, le pedí a mi ex jefe que por favor respondiera mis correos, pero me contestó: ´Luego se te dará respuesta´; la cual nunca llegó. Luego, el viernes 3 de enero, mi jornada laboral fue normal, por lo que no esperé que fuera a resultar en un despido. Lo peor es que en el correo comunican que mi despido fue por justa causa, debido a mi agresión a directivos”.

Actualmente, Raquel dice que está en proceso de denuncia. “Ya fui a Medicina Legal, al médico, tengo remisión a psicología y trabajo social. Se llenó la ficha por violencia de género y espero que me den mi liquidación, remuneración y pago de mi celular”, aclaró. Le puede interesar: Procuraduría: cargos a Luis Francisco Cante por presunto acoso sexual

Copia de Queja Formal 27-12-24 by espriellaperezesteban

Estado de afiliación en salud de Raquel Cáceres. // Foto: Cortesía.
Estado de afiliación en salud de Raquel Cáceres. // Foto: Cortesía.
Estado de afiliación en pensión de Raquel Cáceres. // Foto: Cortesía.
Estado de afiliación en pensión de Raquel Cáceres. // Foto: Cortesía.
Estado de afiliación en pensión de Raquel Cáceres. // Foto: Cortesía.
Estado de afiliación en pensión de Raquel Cáceres. // Foto: Cortesía.
Raquel Cáceres denuncia que en la empresa donde laboraba, se encontraba en malas condiciones. // Cortesía.
Raquel Cáceres denuncia que en la empresa donde laboraba, se encontraba en malas condiciones. // Cortesía.
Raquel Cáceres denuncia que en la empresa donde laboraba, se encontraba en malas condiciones. // Cortesía.
Raquel Cáceres denuncia que en la empresa donde laboraba, se encontraba en malas condiciones. // Cortesía.
Raquel Cáceres denuncia que en la empresa donde laboraba, se encontraba en malas condiciones. // Cortesía.
Raquel Cáceres denuncia que en la empresa donde laboraba, se encontraba en malas condiciones. // Cortesía.

¿Cómo saber si es víctima de acoso laboral en Colombia?

Según el Ministerio de Justicia, el acoso laboral consiste en las conductas constantes y demostrables que se ejercen sobre un trabajador por parte de su jefe, un compañero de trabajo o un subalterno, buscan infundir miedo, angustia o causar un daño que genere desmotivación en el trabajo o induzca a la renuncia.

La Ley 1010 del 2006 de Colombia, establece que existen seis modalidades de acoso:

1. Maltrato laboral: entendido como todo acto de violencia contra la integridad física o moral, la libertad física o sexual y los bienes de un trabajador; así como toda expresión verbal injuriosa o ultrajante que lesione la integridad moral o los derechos a la intimidad y al buen nombre de quienes participen en una relación de trabajo de tipo laboral, o todo comportamiento tendiente a menoscabar la autoestima y la dignidad de quien participe en una relación de trabajo de tipo laboral.

2. Persecución laboral: referida a toda conducta cuyas características de reiteración o evidente arbitrariedad permitan inferir el propósito de inducir la renuncia del empleado o trabajador, mediante la descalificación, la carga excesiva de trabajo y cambios permanentes de horario que puedan producir desmotivación laboral.

3. Discriminación laboral: que tiene que ver con todo trato diferenciado por razones de raza, género, origen familiar o nacional, credo religioso, preferencia política o situación social o que carezca de toda razonabilidad desde el punto de vista laboral.

4. Entorpecimiento laboral: que se da con toda acción tendiente a obstaculizar el cumplimiento de la labor o hacerla más gravosa o retardarla con perjuicio para el trabajador o empleado. También se considera entorpecimiento laboral la privación, ocultación o inutilización de los insumos, documentos o instrumentos para la labor, la destrucción o pérdida de información, el ocultamiento de correspondencia o mensajes electrónicos.

5. Inequidad laboral: que se refiere a la asignación de funciones a menosprecio del trabajador.

6. Desprotección laboral: que es toda conducta tendiente a poner en riesgo la integridad y la seguridad del trabajador mediante órdenes o asignación de funciones sin el cumplimiento de los requisitos mínimos de protección y seguridad para el trabajador.

¿Qué hacer si es víctima de acoso laboral en Colombia?

El Ministerio de Justicia señala que cuando una persona presenta casos de acoso laboral, debe presentar la denuncia ante el Comité de Convivencia Laboral. Además, exponen que:

1. Para presentar la queja o denuncia sobre situaciones de acoso laboral, este es un espacio de diálogo para plantear compromisos mutuos para llegar a una solución efectiva.

2. En caso que la conducta de la persona o las personas que cometen las conductas de acoso laboral debe comunicarle al Comité de Convivencia para que inicie el procedimiento sancionatorio dentro de la empresa o la entidad.

3. Si la situación no logra resolverse al interior de la empresa, la denuncia también podrá dirigirse al inspector de trabajo, los inspectores de policía, los personeros municipales, a la Defensoría del Pueblo o acudir directamente al juzgado para presentar una demanda por los daños causados.

El Ministerio del Trabajo señaló que tiene abiertos sus canales de atención al ciudadano para atender todo este tipo de denuncias. Le recomendamos leer: Petro se refirió a la muerte de la residente de medicina de la Universidad Javeriana

Entre sus canales de atención están las líneas telefónicas, en Bogotá (601) 3779999 Opción 2 y la línea nacional gratuita 018000 112518. Además, a través de la página web www.mintrabajo.gov.co la persona podrá radicar la denuncia o, si lo prefiere, agendar una cita con un asesor de la entidad.

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