Con el objetivo de mejorar la seguridad vial para la comunidad educativa y los ciudadanos, el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (DATT) avanza en la señalización de zonas escolares y arterias viales de la ciudad, a propósito del inicio de las clases el pasado lunes 27 de enero. Le puede interesar: Desvíos en el Centro por obras en la Calle Larga: rutas alternas
Hasta el momento, el DATT indicó que ha completado la señalización vial en 12 entornos escolares, como la Institución Educativa Camilo Torres en El Pozón, el Colegio Fundación Pies Descalzos en Villas de Aranjuez, y la Institución La Esperanza en Crespo. En total, se proyecta la señalización de 40 zonas escolares en este 2025, abarcando las tres localidades del Distrito.
Estas acciones incluyen la demarcación de pasos peatonales, instalación de señalización horizontal y vertical, y la construcción de reductores de velocidad en las vías cercanas a los centros educativos. Le recomendamos: Medidas del Distrito para mejorar el tránsito en la Avenida del Lago
La autoridad del Tránsito informó que también avanza en la señalización de corredores viales clave en el Centro Histórico, la avenida Santander, la avenida Venezuela y la avenida Blas de Lezo. En estas arterias se están implementando trabajos de demarcación de pasos peatonales y colocación de marcas viales, con el objetivo de mejorar la visibilidad y la seguridad de los transeúntes.
DATT exige acciones contra la inseguridad en la Boquilla
Los conductores y transeúntes que transitan por la vía del Mar manifestaron problemas de tráfico lento e inseguridad en la zona, donde ya fueron instalados reductores de velocidad, en respuesta a las peticiones anteriores de la comunidad para reducir el índice de accidentalidad y víctimas fatales por exceso de velocidad.
Ante las denuncias de la comunidad, el DATT anunció su acompañamiento, el pasado 12 de diciembre, a la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) en la instalación de reductores de velocidad en la Vía del Mar, a la altura de La Boquilla.

A pesar de que estos reductores han dado solución a una problemática, ahora la comunidad asegura que se enfrenta a nuevas preocupaciones: movilidad lenta y aumento de hechos delictivos, como atracos a vehículos que transitan por la zona.
Ante esta situación, el DATT hace un llamado a las entidades competentes, entre ellas la Policía Nacional y la Concesión Ruta Costera para que, de manera conjunta, tomen acciones que garanticen la seguridad de transeúntes y actores viales.