La Alcaldía de Cartagena, a través de la Secretaría de Hacienda, presentó un proyecto de acuerdo ante el Concejo Distrital con el fin de hacer una modificación al estatuto tributario, la cual incluye un incremento al Impuesto de Industria y Comercio (ICA) y a la Delineación Urbana.
La secretaria de Hacienda, María Camila Salas, explicó que esta propuesta obedece a que desde el 2006 no se actualizan las tarifas, por lo cual el Distrito cuenta con un rezago de más de 15 años que limita su capacidad para ejecutar obras y cumplir con su Plan de Desarrollo.
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“Los impuestos de ICA y Delineación Urbana se encuentran en niveles relativamente bajos, con relación a otras ciudades. La actualización de las tarifas, además de ser necesaria, es pertinente en un contexto en el que Cartagena busca fortalecer su infraestructura, mejorar la calidad de los servicios públicos e impulsar las inversiones sociales y de desarrollo local”, aseguró Salas.
La propuesta busca aumentar las tarifas de forma progresiva hasta el 2026 a varias actividades de los sectores comerciales, industriales, de servicios y financieros, los cuales verían el primer incremento el próximo año de ser aprobada la iniciativa.
Según la secretaria, esto permitiría aumentar significativamente el recaudo en Cartagena. En el caso del ICA se pasaría de $541.751 millones en 2024 a $696.381 millones en 2026; mientras que en Delineación Urbana se pasaría de $7.741 millones en 2024 a $11.792 millones en 2026.
Aún así, la propuesta no causó agrado entre los gremios empresariales de la ciudad, quienes en la audiencia pública que se llevó a cabo ayer en el Concejo Distrital expresaron que este proyecto no es conveniente y por eso solicitaron su retiro.
Comerciantes en desacuerdo
El gremio de comerciantes, Fenalco Bolívar, a través de su directora, Mónica Fadul, afirmó que el proyecto de modificación al estatuto tributario de Cartagena no está teniendo en cuenta el contexto nacional, en el cual se está tramitando la reforma laboral y la ley de financiamiento, que aumentarían los costos en el sector.
“Como quiera que ambas reformas afectan a todas las empresas del país, debe considerarse el efecto negativo de estas, sumado al de la propuesta de aumento de impuestos propuesto por la administración distrital”, dijo Fadul.
Ante esto, la dirigente gremial pidió tener en cuenta lo que implica este incremento para las empresas, que son las que están generando empleo en la ciudad. “Cada vez que cargamos algo a la economía formal, es un desestímulo a la generación de empleo”, indicó.
Fadul alertó de la afectación de sectores como el de vehículos, supermercados, vigilancia privada y estaciones de gasolina, que sentirían el incremento que pudiera llegar a darse. Frente a esto, insistió en que el Distrito debe desistir del proyecto y pensar en otras estrategias para aumentar el recaudo.
“El plan para incrementar los ingresos debe basarse, como lo hemos expresado sostenidamente en el tiempo, con un mayor esfuerzo administrativo en las áreas de fiscalización y cobranzas. Hay miles de personas que no pagan el ICA, eso sin profundizar en las personas naturales, lo cual indica que la administración debería centrar su esfuerzo en los malos pagadores y no en aquellos que sostienen la formalidad”, puntualizó.
Afectaciones al sector industrial y de servicios
María Claudia Peñas, gerente de la Andi Bolívar, aseguró que este proyecto de acuerdo produce especial preocupación a los sectores industriales y de servicios, que concentran el 78% de lo proyectado a recaudar para el 2026.
Peñas aseguró que están especialmente afectadas las empresas de hidrocarburos, los muelles y los puertos; y advirtió que este incremento podría desestimular la llegada de nuevas empresas.
“Entendemos la necesidad de recaudar más recursos para atender las demandas ciudadanas, pero consideramos que la forma de conseguirlos no es aumentando la carga tributaria a quienes más contribuyen”, indicó.
En este sentido, aseguró que el Distrito debe pensar en otras estrategias que le permitan fortalecer su recaudo, como la gestión fiscal y en especial, la focalización y el seguimiento de los recursos, en lugar de aumentar las tarifas a las empresas.
“Consideramos que es absolutamente inconveniente este proyecto de acuerdo y solicitamos respetuosamente su retiro, porque puede ser lesivo no solo para las finanzas de las empresas del sector empresarial sino también para las finanzas públicas del Distrito”, puntualizó Peñas.
Refinería de Cartagena se pronuncia
Desde la Refinería de Cartagena, empresa adscrita al Grupo Ecopetrol, también se pronunciaron en contra del proyecto de acuerdo.
Leonardo Berrío, jefe jurídico de la empresa, explicó que no hay lugar a una comparación con las tarifas de otras ciudades porque las dinámicas de Cartagena en la actividad de hidrocarburos son distintas.
Además, afirmó que no es necesario aumentar la tarifa, pues el recaudo del ICA en la Refinería ya ha presentado un crecimiento debido al incremento en la base gravable de la empresa, producto de su mayor capacidad de carga. En este sentido, aseguró que una modificación a la tarifa sería contraproducente.
“Al incrementar la tarifa del ICA se tendría un gasto adicional que representaría una mayor pérdida en el año para la Refinería, lo que afecta, entre otros aspectos, la generación de caja para atender las necesidades del 2025 en adelante”, dijo.
De igual forma, afirmó que esto podría tener un impacto en las inversiones, pues el factor tributario es clave en las evaluaciones financieras.
“Hacemos un llamado a la administración distrital a que reconsidere este tipo de movimientos que producen ausencia de seguridad jurídica tributaria para las inversiones futuras”, afirmó.
Sector construcción en contra
Este gremio también se mostró en contra de la iniciativa. Irvin Pérez, gerente de Camacol Bolívar, aseguró que el sector no está pasando por un buen momento como para que se aumenten los impuestos. De hecho, dijo que los lanzamientos de nuevos proyectos han tenido una caída del 42% y las iniciaciones una disminución del 33%, lo cual también ha impactado la generación de empleo.
“En vez de subir los impuestos lo que se tiene que impulsar es una política de reactivación. Hay un decrecimiento en el sector de la construcción que es palpable y no lo podemos cargar más”, dijo.
Pérez también invitó al Distrito a pensar en otras medidas que no perjudiquen a las empresas. “Hay una discusión válida sobre cómo el Distrito puede generar más ingresos pero esta no es la forma. Hay que concentrarse en fortalecer la vigilancia, el control y el recaudo de los que no están haciendo su aporte a la sociedad”, puntualizó.
Distrito defiende el proyecto
Pese a las observaciones de los gremios, el Distrito, a través de la Secretaría de Hacienda, afirmó que la iniciativa de aumentar estos dos impuestos tiene que verse como una propuesta integral en el marco de las diferentes acciones que se han tomado durante todo el año para mejorar las finanzas públicas.
En este sentido, indicaron que ya han venido ejecutando acciones para fortalecer la fiscalización tributaria e incentivar el cumplimiento de las obligaciones formales, como los descuentos en intereses, los incentivos tributarios, la identificación de contribuyentes sin declarar y las medidas de cobro coactivo.
Además, aseguraron que restaurantes y hoteles no tendrán un incremento en su tarifa.