El pasado 26 de febrero se firmó el acta de inicio para la demolición del edificio Aquarela, una obra que en los últimos años ha sido objeto de polémica por su cercanía al Castillo San Felipe de Barajas y por poner en riesgo la declaratoria de Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad con la que cuenta Cartagena.
El proyecto tiene un costo de $11.897 millones y cuenta con la gerencia de la Empresa de Desarrollo Urbano de Bolívar (Edurbe) que subcontrató a la firma Atila para realizar el desmonte de la estructura piso a piso.
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Aunque ya han pasado cuatro meses desde que se iniciaron las intervenciones, la gerente de Edurbe, Fanny Guerrero, manifestó que la demolición lleva un 16,43% de avance, lo que representa el desmonte de cinco pisos.
Por este motivo, teniendo en cuenta que el plazo de ejecución del contrato es de seis meses, indicó que se hizo una solicitud a la Alcaldía de Cartagena para ampliar el tiempo de la obra.
“Tenemos ante el Distrito la solicitud de una modificación al contrato pidiendo una ampliación de 60 días, para poder dentro de este método y con la seguridad y calidad que se requiere dar cumplimiento. Esta ampliación no implica modificación del precio. Son condiciones de tiempo necesarias determinadas por el equipo técnico y jurídico que evaluó la solicitud del contratista”, indicó Guerrero.
La gerente de Edurbe manifestó que la Alcaldía está evaluando dicha solicitud y reiteró la importancia que tiene este proyecto para la ciudad.
“El Aquarela lo hemos asumido como el proyecto más importante de la ciudad por cuanto representa la defensa al patrimonio. En ese sentido, la ejecución se ha realizado con la idoneidad y la seguridad adecuada”, dijo
Las fases de la demolición
La demolición del edificio Aquarela está planeada para darse en cuatro fases. La primera ya está lista, que fue el desmonte de los primeros cinco pisos (del 25 al 20). Este proceso consistió en el desmantelamiento manual de la estructura a través de un proceso de demolición neumática.
La segunda fase va del piso al 20 al 10 y comprende el desmonte modular de placas y muros con ayuda de izaje de cargas. Para ello se utilizará una grúa telescópica que será empleada para lograr la elevación de cargas. En esta etapa se utilizará la técnica de corte en diamante.
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La tercera fase va del piso 10 al 1 y se realizará mediante una demolición de largo alcance con maquinaria de brazo largo.
Por último, como cuarta fase, se realizará una demolición estándar para eliminar cualquier pieza sobrante del edificio.