En el corregimiento de Galerazamba, jurisdicción del municipio de Santa Catalina, al norte de Bolívar, se vive una emergencia debido a la erosión costera que está poniendo en riesgo la principal fuente de sustento: la producción salinera.
El fenómeno natural, exacerbado por fuertes vientos, ha provocado la intrusión del mar en el área del salinón, como es conocido ancestralmente, donde tanto nativos como pescadores de la comunidad y zonas cercanas obtienen su sustento diario a través de la pesca. Lea: Accidente entre bus y motocicleta en Galerazamba deja tres personas heridas
En esta oportunidad la fuerza del mar rompió los jarillones que protegían el área y las aguas ingresaron primero al denominado depósito 4 y ahora penetraron en el depósito 5 o salinón, lo que a su vez tiene en riesgo a varias de las viviendas del pueblo cercanas a esa zona. Desde el boquete que se abrió hasta las casas hay cerca de tres kilómetros de distancia. Lea: Santa Catalina será el “motor turístico y cultural” de Bolívar: Icultur
Las famosas salinas de Galerazamba, anteriormente administradas por el Banco de la República y ahora en concesión a una empresa privada, según explicaron a este medio algunos pobladores, se encuentran en esa situación debido a la falta de mantenimiento de los jarillones que separan las charcas del mar.
Un líder de Galerazamba, que pidió no revelar su identidad, señaló que la empresa encargada de la concesión, Cabrales Paffen, se encuentra contractualmente obligada a mantener los jarillones y garantizar la integridad de las Salinas que comprenden una extensión de ocho kilómetros. Sin embargo, la falta de cumplimiento ha llevado a una situación crítica, con la posible pérdida de la cosecha de sal planificada para abril o mayo, lo que impactará negativamente en los 300 trabajadores directos y los 2000 habitantes del corregimiento.
Los residentes, preocupados por la inminente amenaza, hacen un llamado urgente a las autoridades pertinentes, incluyendo la Agencia Nacional de Minería, así como al presidente Petro y los gobernadores de Bolívar y Atlántico, para que tomen medidas inmediatas y efectivas que protejan tanto a la población como a la producción salinera.
Además, el temor ha crecido en las últimas horas con las previsiones de lluvias y vientos de hasta 60-70 kilómetros por hora pronosticadas por el IDEAM para este fin de semana, lo que podría empeorar la erosión costera y la intrusión del mar en las salinas.