Viernes, 2 de la madrugada. “Es una historia que llegó a su fin, después de alas y magias sin par, amor profundo tan dentro de mí, qué me maldices”, dice la estrofa de una canción que resuena desde la terraza de una casa en el barrio San Fernando. Las personas que viven cerca de la vivienda no pueden dormir por el alto volumen de la música y deciden llamar a la Policía.
La anterior escena se repite a diario en diferentes barrios de Cartagena. Según cifras de la Policía Metropolitana, en lo corrido del año se han reportado, a la línea 123, 3.335 quejas por exceso de ruido producido por equipos sonoros, la instalación de picós y aglomeraciones o fiestas.
Las llamadas provienen desde todos los sectores de la ciudad; sin embargo, hay 10 que llevan la delantera. Estos son: Olaya Herrera, con 128 quejas por exceso de ruido; El Pozón, con 123 quejas; y San Fernando, con 114. En cuarto y quinto lugar se ubican Turbaco, con 100 quejas; y Nuevo Bosque, con 76.
La Policía indicó que desde enero hasta septiembre se han impuesto 34 sanciones a vecinos bulliciosos por afectar la tranquilidad y convivencia y negarse a desactivar las fuentes de ruido.
Para este tipo de conductas, el Código de Policía, en su artículo 33, contempla la disolución de la reunión o actividad que genera el sonido, así como una multa general tipo 3.
Esta multa corresponde al pago de 16 salarios mínimos diarios legales vigentes.
Habla el EPA
El Establecimiento Público Ambiental (EPA) de Cartagena detalló a El Universal que ha recibido 94 quejas por contaminación auditiva. De estas, el mayor número se ha registrado en la Localidad 2, con un 41%, seguida por la Localidad 3, con un 33%; y finalmente la Localidad 1, con 26%.
Lo cierto es que en Cartagena no solo los particulares exceden el límite de volumen permitido por las autoridades, pues muchos establecimientos comerciales como bares, discotecas y terrazas también lo hacen.
El EPA señaló que, a la fecha, se han realizado 42 operativos de control y vigilancia en diferentes sectores de la ciudad, visitando 93 establecimientos.
Como resultado de estos controles se han impuesto 40 medidas de suspensión preventiva a comercios en sectores como el Centro Histórico, Los Alpes, Los Cerezos, Buenos Aires, El Pozón y Fredonia.
La autoridad ambiental afirma que los comercios deben implementar medidas necesarias para evitar que la onda sonora generada por sus equipos trascienda al exterior.
Tenga en cuenta
Los límites aceptables de ruido varían de acuerdo con la hora del día y el sitio o establecimiento. Las fábricas y los parques de diversiones permiten niveles de ruido más altos que los hospitales y las zonas residenciales. La intensidad que se maneja durante el día es más alta que en la noche. Así, la legislación nacional, consagrada en la Resolución 627 de 2006, estipula niveles de ruido entre 55 (día) y 50 (noche) decibeles (dB) para las áreas tranquilas; entre 65 y 55 dB para las de ruido moderado; y entre 80 y 75 dB para las más ruidosas.
El Establecimiento Público Ambiental (EPA) y la Policía son los entes autorizados para realizar mediciones de ruido y ejercer medidas preventivas y de control.
Es de precisar que el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (DATT) es el encargo de controlar las fuentes de ruido emitido desde los vehículos.
¿Donde interponer una queja? De manera presencial en las instalaciones del EPA, en el barrio Manga, Cuarta Avenida, calle 28 #27-05, edificio Seaport Centro Empresarial.
También lo puede hacer a través del correo electrónico atencionalciudadano@epacartagena.gov.co y a través de la página web de la entidad www.epacartagena.gov.co, ingresando a la sección: Peticiones, quejas, reclamos o denuncias.