Un significativo número de personas en condición de calle fue atendido, en las últimas horas, por funcionarios del programa Habitantes de Calle, de la Secretaría de Participación y Desarrollo Social del Distrito.
El acto se realizó en la Casa del Pescador, del Barrio Chino, a orillas de la avenida del Lago, en cercanías del mercado de Bazurto, precisamente una de las zonas donde más se concentra este fenómeno social. Lea: 50 habitantes de la calle cuentan con un nuevo hogar en Cartagena
Asimismo, el evento contó con el concurso de funcionarios del Dadis, la Personería Distrital, la ESE Cartagena de Indias y la Junta de Acción Comunal del Barrio Chino.
El Dadis dispuso un grupo de funcionarios para que se encargara de tomar muestras rápidas de VIH, vacunar contra la influenza y hacer promoción social.
A su turno, la ESE Cartagena de Indias prestó los servicios de medicina general y odontología, mientras que Cordeshu dispuso de un grupo de jóvenes recuperados de las calles, quienes se encargaron de bañar, cortar cabellos, entregar ropas y alimentar a los beneficiados que iban llegando al sitio de la reunión. Lea: ¿Quiere ayudar a un habitante de la calle? “No le dé dinero ni comida”
Elvira Bervel, trabajadora social del programa Habitante de Calle, describió el hecho como una gran brigada para acoger a todos los habitantes de la calle que abundan desde la esquina del centro comercial Caribe Plaza hasta la urbanización Martínez Martelo.
“Aquí les tenemos atención en medicina general, odontología, pruebas de VIH, kit de aseos y prendas para que se vistan”, explicó la funcionaria.
Igualmente anotó que en la actividad se esperaba impactar a unos 60 habitantes de calle, y agregó que actividades como esta se realizan cuatro veces en el año, siendo la del Barrio Chino la número tres. Lea: “Nadie puede ni nos quitarán las talanqueras”: habitantes de Martínez Martelo
“Las anteriores las hemos hecho en Chambacú y en el Centro Histórico. En el primer sector nos resulta más dispendiosa la misión, porque resulta que ahí se localizan expendedores de estupefacientes, quienes se imaginan que les vamos a dañar el negocio y hacen todo lo posible para entorpecer una labor que lo único que busca es el mejoramiento de los habitantes de calle”.
Respecto al rescate de los habitantes de la calle, en el sentido de que abandonen la mala vida y regresen a sus hogares, explicó que “lo primero es hacer una caracterización para saber quiénes tienen seguridad y quiénes no la tienen, para dárselas. Si quieren una rehabilitación, se les ayuda; y si quieren ir al hogar de paso, se les lleva”.
En cuanto al habitante de la calle expresa sus deseos de salir de esa vida, la Secretaría de Participación se encarga de hablar con la EPS del beneficiado, mientras Cordeshu los lleva a su hogar de paso y los pone en manos de un grupo integrado por psicólogos y trabajadores sociales, quienes se encargan de la salud mental del rehabilitando.
El presidente de la JAC del Barrio Chino, Hernán Julio Martínez, comentó que el problema de habitantes de la calle en esa zona tiene mucho que ver con la influencia del mercado de Bazurto, “pues es allí donde ellos consiguen los elementos que llevarán a las chatarrerías, para conseguir dinero para su manutención y compra de alucinógenos”. Lea: Así atendieron a 79 habitantes de la calle en el Barrio Chino
Aseguró que “algunas empresas privadas del sector nos han colaborado mucho para hacer actividades con los habitantes de calle, al igual que la Secretaría de Participación y Desarrollo Social, despacho con el que estamos muy agradecidos y esperamos seguir recibiendo ayuda”, indicó el líder comunal.
