Los desagradables que se perciben constantemente en los Cuatro Vientos y sectores aledaños como El Cairo o El Líbano, causan gran desconcierto entre los residentes de la zona y los que transitan día a día por ella, especialmente en quienes frecuentan la estación de Transcaribe.
El Universal se comunicó con líderes comunales del barrio el Líbano, quienes explicaron varias de las posibles razones por las cuales se presentan este tipo de situaciones, que desequilibran la tranquilidad de las personas que viven en los alrededores y de los usuarios del sistema que se movilizan en los vehículos que cubren esa ruta. (Lea: Aumentan frentes de trabajo: avanza alcantarillado de El Carmen de Bolívar)
Una de las hipótesis que manejan los líderes se remonta a la construcción de la estación Cuatro Vientos de Transcaribe, ya que anteriormente la zona no contaba con rejillas y las calles del sector funcionaban como canales de desagüe para las aguas lluvias, conduciéndolas hasta la Ciénaga de la Virgen. Sin embargo, una vez entró en funcionamiento la estación en el año 2016, las calles por donde solía bajar el agua dejaron de funcionar como desaguaderos y empezaron los fuertes olores que hoy en día se mantienen.
“Se tenía que hacer un sumidero o una rejilla para que se facilitara la desembocadura de las aguas pluviales, y cuando se abrió la estación empezó este problema de contaminación ambiental en el sector”, señaló Faisulis de Ávila, presidenta actual de la Junta de Acción Comunal del El Líbano sector Central.
“Considero que las autoridades competentes deberían encargarse de la situación para brindar pronta solución a la grave contaminación que nos afecta a todos los habitantes y transeúntes del sector, pues la problemática lleva varios años y al parecer el alcantarillado no está en óptimas condiciones”, opinó Daniela Villa, residente de El Cairo.
El antiguo presidente de la JAC de El Líbano, Manuel Batista, contó que a la altura de la calle Salim Bechara había un canal que pasaba por debajo de la avenida Pedro de Heredia, el cual supuestamente quedó bloqueado cuando realizaron la obra, ya que habrían tapado con losas esa estructura que servía para desaguar la zona. El expresidente agregó que actualmente esas losas se encuentran en riesgo de colapsar porque sobre ellas transita diariamente una gran cantidad de vehículos pesado. (Lea: Ciénaga de La Virgen: con muchos problemas y oportunidades)
“Un alcantarillado que ya tiene más de 40 años, que nunca se ha ampliado; un alcantarillado al que se le exige más capacidad de la que tiene, y un alcantarillado que ha soportado el incremento de viviendas y construcción de nuevos edificios, es un alcantarillado que requiere con urgencia un reemplazo y una ampliación”, finalizó Batista, conminando al Distrito a buscar soluciones urgentes.

