“Desde febrero no me venían dando la levocitirizina, en junio llamé y me dijeron que en julio podría reclamarlas, pero solo me dieron la de un mes, todo lo que debieron darme desde febrero se perdió. Ahora vengo a reclamar una crema que me ordenó un ginecólogo desde el 14 de julio y me dicen que ya no hay. La medicina que me mandó el médico general tampoco me la dieron completa. Vengo y vengo y nunca me voy satisfecha”.
Las anteriores declaraciones son de María Parra de Rosales, una mujer que denuncia el servicio brindado por la IPS y la farmacia en las que reciben atención.
Parra es una docente de Cartagena, quien al igual que muchos miembros del Magisterio de educadores de la ciudad y el departamento, han hecho reiteradas quejas públicas en contra de la clínica del Norte.
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Recientemente, dentro de las instalaciones, los maestros protestaron y enviaron los videos a diversos medios de comunicación, dando a conocer la problemática que los afecta.
“Es una clínica de mal servicio, anteriormente había un tablero y se podía ver el número del turno que le tocaba a uno, pero ahora cualquiera llega con o sin receta y lo atienden primero. Ese desorden no es lo peor, lo peor es que casi nunca entregan los medicamentos, tampoco dan los pendientes, exigimos que la Unión Temporal del Norte se vaya ya”, agregó el docente Carlos Peralta.
“Por la dignidad de nosotros y nuestras familias, exigimos que se nos atienda como debe ser y les den solución a los problemas de salud que vivimos”, añadió.
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Otra afectada, que pidió no revelar su nombre, dio a conocer su desafortunado caso: “Desde principio de año me vengo tratando con un doctor que cada cuatro meses me manda los medicamentos, pero desde mayo no me los han dado porque no los hay. El ginecólogo me mandó unos óvulos en junio y tampoco me los han entregado, la farmacia es un caos, no sabemos qué están haciendo con toda la droga que necesita la gente. Los pendientes tampoco los dan. Estamos cansados y necesitamos soluciones porque estamos pagando mucho dinero por estos servicios”.
Este medio intentó contactar a voceros de la IPS señalada pero no fue posible. Por su parte, desde el Departamento Administrativo Distrital de Salud, Dadis, señalaron que este grupo de profesionales hace parte de un régimen especial.
“En octubre se iniciaron las auditorías a estas entidades, en este caso puntual se necesita la queja formal ante la oficina del Participación del usuario, PAU, para tener argumentos y proceder, estos procesos llevan su tiempo”, indicó una vocera del Dadis.