Hoy es un día que tiene todas las credenciales para pasar como otro día normal en el país. Tal vez, la Universidad Nacional de Colombia tenga alguna conmemoración por cumplir 154 años de fundada; pero lo que sí es muy probable es que en una gran mayoría de colombianos pase desapercibido el equinoccio, un extraordinario suceso natural en el que el día tendrá la misma duración que la noche en todos los lugares del planeta.
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En Colombia, al no estar regida por las dinámicas climáticas de las cuatro estaciones por su posición geográfica, las personas no tienen ese hincapié rutinario de los cambios de temporada, celebrado en otras latitudes mediante rituales, grandes eventos y nueva ropa en el closet. Por ejemplo, en Nueva York, al estar en el hemisferio norte, se presenta el equinoccio de otoño, y con él, un espectáculo fotográfico de hojas cobrizas pereciendo y flotando líricamente hasta el suelo.
Hoy, en el hemisferio sur se celebra el equinoccio de primavera y con este se inaugura un periodo de paisajes floridos y abundancia agrícola. Sin embargo, en Colombia, dividida en dos por el corte selvático de la línea del ecuador, y con territorios en los dos hemisferios, ninguno de los dos equinoccios tiene la merecida popularidad.
Origen y definición del término
El latín “aequinoctium”, o sea “noche igual”, se da porque el sol cruza el ecuador celeste de la Tierra, logrando que sus rayos incidan de la misma manera en el hemisferio norte y en el sur y, por lo tanto, el día tiene la misma duración en cada rincón del planeta.
Equinoccio de otoño en el hemisferio norte y su homónimo, pero de primavera, en el hemisferio sur. Tiempo de la cosecha, la caída de las hojas, la migración de las aves y el comienzo de la temporada más fría del año en países como Gales o Inglaterra; en Argentina, en cambio, los paisajes florecen, el sol resplandece y las chaquetas son engavetadas.
Desde la antigüedad, a la fecha se le ha dotado de potencialidades espirituales y energéticas típicas del antes y después de un periodo de equilibrio en el mundo.
Ocurre entre el 21 y 23 de septiembre de cada año, pero la fecha oficial del equinoccio cambia debido a que el periodo orbital de la Tierra no es exacto. Tarda 365,24 días en dar una vuelta completa al Sol y, por lo tanto, su rotación tiene algunas variaciones en el tiempo y un desfase que se ajusta en los años bisiestos.
¿Cómo se conecta Colombia con Gales y México?
El equinoccio será celebrado, como es costumbre, a través de rituales en distintas partes del mundo. La más conocida es el Mabon, una fiesta celta que se celebra en muchas partes del Reino Unido, especialmente territorios galeses, y que da la bienvenida al otoño. Conmemora la cosecha de los frutos que alimentarán barrigas en el invierno y se departe con inmensos banquetes agradeciéndoles a los dioses por la prosperidad y las bendiciones agrícolas.

Hoy, tal vez con unas horas de diferencia, en Chichén Itzá, México, el movimiento especial del sol hará que en la pirámide maya de Kukulcán se presente un fenómeno misterioso que solo puede verse unas horas al año: la luz y las sombras del lugar proyectan el holograma de una serpiente emplumada que desciende por las escalinatas del templo. Un efecto óptico con un simbolismo que se conmemora con rituales indígenas y afluencia de turistas.

2.360 kilómetros al sur, en Colombia, en distintos sitios de Cundinamarca y Bogotá, el equinoccio de primavera se celebrará por grupos que han llevado la nostalgia cultural a la realidad, a través de encuentros y rituales que rescatan antiguas fiestas muiscas como la Huitaca Hicaguy, más conocida como la fiesta de las flores. Este miércoles habrá conmemoraciones en pueblos de la región y en cabildos indígenas en los barrios de Suba y Bosa en Bogotá.

Equinoccio y navegación
José Gregorio Portilla, profesor del Observatorio Astronómico Nacional, indica que “en Colombia, por su proximidad ecuatorial, los efectos del equinoccio pueden pasar desapercibidos”. Sin embargo, señala, en sus términos, que muchos afirman que la navegación puede afectarse porque las mareas son más fuertes, ya que al estar el sol cerca del ecuador y como la luna también está próxima al ecuador en su órbita, los efectos gravitacionales se acentúan y, por ende, la subida y bajada del nivel del mar son más notorios.
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Equinoccio no es lo mismo que solsticio
Los solsticios y los equinoccios son eventos astronómicos que están relacionados con el movimiento de translación de la Tierra, por el cual el planeta realiza una vuelta completa alrededor del sol. Estos eventos son los responsables de las cuatro estaciones del año: otoño, primavera, verano e invierno.
Ya referida la relación entre el equinoccio con la primavera y el otoño con respecto a la posición del sol sobre el ecuador, por otro lado, está el solsticio, relacionado con el verano y el invierno. Proviene del latín solstitium que significa “sol quieto”. Durante los solsticios, el sol se encuentra en su punto más próximo o alejado de cada una de las mitades terrestres.
Así, la Tierra recibe más cantidad de luz en un hemisferio que en el otro, esto explica que en un hemisferio del planeta sea verano y, mientras, en el otro es invierno. Los solsticios ocurren dos veces al año y suponen el día más largo y el más corto del año, en invierno y verano, respectivamente.
