El Islote San Bernardo es famoso a nivel internacional por ser una de las islas “más densamente pobladas del mundo”, debido a la gran cantidad de personas que habitan en un espacio de apenas una hectárea.
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Lo anterior, sumado a su ubicación en el archipiélago del mismo nombre, ha posicionado al turismo como una forma de subsistencia entre sus habitantes, sin embargo ese privilegio no se ha traducido en mejoras para la comunidad.
Muestra de ello son las mismas viviendas, que fueron construidas de manera empírica por sus habitantes y que poco o nada han cambiado desde que se levantaron. Ante el reducido espacio de la isla y el crecimiento de la misma población, la mayoría vive hacinada, en condiciones precarias y sin muchas necesidades básicas cubiertas.
Pero en este momento, una de las prioridades de la comunidad es evitar una tragedia, ya que la mayoría de las viviendas están agrietadas y sus varillas están a la vista.
“Necesitamos lanzar un SOS para evitar una crónica de una muerte anunciada. Las casas están a punto de desplomarse y puede ser un efecto dominó. Por lo pegadas que están, una casa se puede tirar a la otra. Hay casas que son de dos pisos y comparten el mismo cimiento, por lo que necesitamos que reaccionen lo más rápido posible”, expresó Ramiro de Hoyos, inspector de Policía del Islote.
En este sentido, invitó a las autoridades a tomar las medidas para evitar una desgracia. La situación también se repite en Puerto Caracolí – Isla Múcura.
El Universal conoció que el pasado 3 de septiembre entidades como el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, el Ministerio de Vivienda y Corvivienda visitaron la isla, a lo que concluyeron que es necesario realizar un censo o caracterización de las viviendas, lo cual sería competencia de Gestión del Riesgo.
Proyecto
En coordinación con las fundaciones Caballito de Mar y Llena Una Botella de Amor se plantea reorganizar el Islote y también Isla Múcura con viviendas construidas a base de elementos reciclables.
Se tienen previstas 160 viviendas y también la construcción de una Estación de Policía, aulas comunales, salones múltiples, biblioteca, área médica y polideportivo.
Estas viviendas, cuyos diseños ya se tienen, están pensadas como módulos multifamiliares de dos niveles con los espacios básicos de toda casa digna: sala, comedor, cocina, baño, habitaciones y zonas exteriores.
Serían 112 viviendas para el Islote y 48 para Isla Múcura, y con ello se espera disminuir el déficit habitacional que tienen estas comunidades.