Con mucha inconformidad se encuentran los residentes del barrio La Castellana, quienes, desde el pasado marzo, le enviaron un derecho de petición a la inspección de Policía de su zona, para que intercediera en un problema que los aqueja, pero a la fecha no les han dado respuestas positivas ni soluciones.
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Se trata, según los peticionarios, de una obstrucción a la visibilidad de los vecinos, ya que, al parecer, hay un nuevo local comercial que hizo una estructura metálica en la terraza, vulnerando las demarcaciones de planeación e incumpliendo los acuerdos de normas urbanísticas.
Un total de 20 residentes firmaron la solicitud, alegando que la falta de visibilidad generada por dicha estructura, los afecta porque no pueden observar quién se acerca a sus viviendas y las intenciones que pueda llevar.
“Los dueños de la vivienda la tienen en arriendo y ahora hay un local de celulares, pero alargaron la terraza al construir esa estructura metálica. La comunidad instauró la queja en marzo, antes de que empezara la pandemia, pero han pasado los meses y no han venido a hacer ni siquiera una visita de inspección. Cuando nos pronunciamos, apenas la estaban construyendo, ya tiene rato funcionando”, señaló una residente, quien pidió reserva de su identidad.
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La comunidad también solicitó a las autoridades prestar mayor atención a las ventas ambulantes que hay en la zona, las cuales se habrían duplicado en las últimas semanas. “Este es un problema histórico, hay toda clase de vendedores en las afueras del centro comercial y de este lado de la avenida Pedro de Heredia. Pero ya no solo están en la vía sino que se han venido metiendo a las calles del barrio. Lo mismo ocurre en las afueras de la clínica General del Caribe. Allí la obstrucción es grande y muchas veces se forman trancones, porque los carros no tienen por dónde cruzar”, añadió otro habitante de La Castellana.