Son varios los pilotos de reactivación económica que se están adelantando desde la Alcaldía para agilizar la apertura de diferentes sectores de Cartagena. Entre ellos, el del sector náutico y el del servicio de restaurantes en mesa, de cara a la gran reapertura de la ciudad que se avecina con la reanudación de los vuelos nacionales.
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Ante ello son varias las dudas que inquietan a los habitantes de la zona insular, quienes se sienten por fuera de la construcción de estos planes piloto, en los que creen que deben tener participación, ya que son sus territorios los que más dependen del turismo próximo a reactivarse.
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“Estamos pidiendo que para hacer esta apertura se socialice a la comunidad cómo va a ser el recibimiento de los turistas y las personas que vengan a los 27 restaurantes que son de nativos, porque ya los grandes hoteles tienen su protocolo de bioseguridad, pero los negocios de nosotros no”, indicó Ana María Coneo, representante legal del Consejo Comunitario de Punta Arena.
Coneo insiste en que debe hacerse una propuesta conjunta entre la Alcaldía, la Capitanía de Puerto y la comunidad para que eventualmente se pueda reactivar el turismo en esta zona, sin comprometer la salud de los nativos.
“Esta es una comunidad completamente sana, solo hubo un caso de una persona asintomática que se recuperó satisfactoriamente y de ahí en adelante no hubo más casos. Estamos libres de COVID-19”, añadió.
El temor de la comunidad radica en que con la apertura, el desplazamiento masivo hacia las islas pueda llevar algún tipo de contagio a la comunidad, algo que sería nefasto teniendo en cuenta la deficiente red hospitalaria en toda la zona insular, donde ni siquiera hay un médico permanente.
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Por este motivo, si bien aclaran que no se oponen a esta reactivación, que por el contrario les beneficia teniendo en cuenta que más del 80% de los nativos dependen del sector turístico, exigen que los protocolos sean debidamente socializados dentro de la comunidad y que haya presencia de las autoridades.
“Acá ningún restaurante está abierto ni hay atención al público, por eso también le pedimos al Distrito que por favor mire hacia estas comunidades, porque ya se está pasando mucha necesidad. Hemos tenido algunos mercados, pero no se han acordado más. Los que más están padeciendo son quienes viven del turismo, los que manejan los deportes náuticos, ellos no tienen ya cómo sobrevivir a esta pandemia”, puntualiza.
De esta manera la cuarentena insular se ha sostenido con las ayudas que han llegado tanto del Distrito como de empresas privadas, y de la pesca como principal fuente de sustento, pero aseguran que no ha sido suficiente para tratar de mitigar la difícil situación que atraviesa la comunidad con el cierre de sus playas.
Medidas vigentes
Las medidas que están vigentes para estas comunidades son:
- Embarques y desembarques de 6 a. m. a 11 a. m. y de acuerdo al pico y cédula.
- Solo se permite el tránsito de nativos. Está prohibido el zarpe de embarcaciones turísticas o comerciales.
- La ocupación de las embarcaciones debe limitarse a un 30%.
- Uso obligatorio de tapabocas.