Durante casi dos días, una bolsa que contenía elementos de protección personal usados, como guantes y batas quirúrgicas desechables, permaneció en la terraza de una vivienda en el barrio Las Gaviotas, luego de que unos funcionarios sanitarios llegaran a monitorear a una paciente positiva de COVID-19.
La preocupación para esta familia y para sus vecinos, es que posiblemente la bolsa y lo que había adentro podrían estar contaminados, por lo que le hicieron un llamado a la EPS y a su proveedor para que la situación no se repita en otras viviendas o sectores de la ciudad.
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¿Qué sucedió?
La mujer atendida arrojó positiva para coronavirus en una muestra que le hicieron a comienzos de mayo. Se presume que lo adquirió en la ambulancia o en la clínica a donde llevaron a su papá, de 86 años, que tenía síntomas y quien desde ese momento se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Madre Bernarda.
En la vivienda hay otros familiares que, pese al contacto estrecho, no están contagiados, pues las pruebas que les han realizado han resultado negativas.
Según los denunciantes, la contagiada, de 57 años, ha tenido un proceso leve y estable, sin embargo, le han hecho chequeos permanentes para monitorear su evolución. Uno de esos chequeos fue el pasado lunes festivo 25 de mayo, cuando personal médico llegó a su residencia para examinarla. La queja es porque, al salir, los dos hombres se quitaron los elementos de protección personal y demás herramientas con los que atendieron a la señora, los metieron en una bolsa roja y los dejaron tirados en la terraza, asegurando que luego volverían por ellos. Pero esto nunca pasó y la bolsa permaneció allí demasiadas horas, generando preocupación en los habitantes.
“El martes en la madrugada llegó otro equipo a hacer muestras a mi hermana, y en la casa les comentaron de la bolsa que estaba desde el día anterior, y la respuesta que dieron era que no había problema, que la metieran en una bolsa negra y la echaran en el camión de la basura. Todo eso resulta muy incomprensible, ese no debería ser el protocolo”, sostuvo un miembro de la familia querellante.
Este medio le comunicó la situación a la EPS en cuestión, y argumentaron que con los datos de la paciente y la dirección suministrada, averiguarán cuál fue el proveedor que realizó la visita para esclarecer los hechos, pues ese no es procedimiento adecuado.