En los últimos dos meses los siniestros en el mar parecen ser frecuentes. La muerte de una joven a punto de graduarse de psicología, en el balneario de Cholón tras ser golpeada por una lancha; el impacto frontal de otra lancha contra un flotador de arrastre en el que estaban dos hermanos, que quedaron heridos, mientras daban vueltas por la aguas de Choloncito, en Barú; y el reciente volcamiento de una lancha en la que regresaban a Cartagena, desde esa misma zona insular, una familia de turistas y que en vez de ser rescatados fueron atracados por tres sujetos que se desplazaban en motos acuáticas, al parecer nativos del sector. A todos estos hechos se suman muchos más que han quedado registrados en videos y que dejan en evidencia el poco control técnico y de seguridad a las embarcaciones, la protección de los turistas, y la falta de un plan en el que prevalezca la protección de la vida, la seguridad y buena atención a los turistas. Asimismo persisten las irregularidades en los pequeños muelles, muchos de ellos piratas; prevalecen los abusos a turistas en el cobro de bienes y servicios que se les ofrecen. El foco se ha centrado en la zona insular de Cartagena y en sus 13 kilómetros de playa.
Frente a la situación, el Consejo Gremial de Bolívar; y la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato) se pronunciaron exigiendo la aplicación del decreto de zonificación de playas. “Lo que está ocurriendo en el destino con respecto a las playas y la zona insular es un llamado urgente a las autoridades a que se extremen medidas y se tomen decisiones contundentes. Elevamos solicitud para no postergar esta problemática”, anunció Anato en Cartagena. Pide que haya controles efectivos, aplicar urgentemente el decreto de zonificación de playas, ponerle lupa al descontrol en el alquiler de embarcaciones, y frenar la sobre explotación de recursos naturales.
Los hoteleros exigen a las autoridades, al alcalde William Dau, a la Dirección Marítima, Dimar; a Corpoturismo y al Ministerio de Comercio “verificar la idoneidad de los planes vendidos por agencias que no cumplen la legislación vigente (informales) pues existe una corresponsabilidad en la problemática (de las autoridades)”. En el mismo sentido el Consejo Gremial de Bolívar, que agrupa a entidades de los distintos sectores de la productividad, instó a las autoridades “a reforzar los controles requeridos en la zona insular, playas y sector turístico de Cartagena, que corresponden según sus competencias y que son necesarios para la seguridad de visitantes y residentes”.
La reglamentación de las playas de Cartagena está recogida en el Decreto 1811 del 31 de diciembre de 2015 que agrupa todas las normas sobre la playas para “asegurar una cumplida satisfacción en el uso público de las playas en las actividades recreativas, deportivas, sociales y explotación comercial de estas áreas”. También está la Resolución 0089 de 2017, que establece las disposiciones de seguridad para el ejercicio de las actividades marítimas de recreación y deportes náuticos en la jurisdicción de Cartagena.