Por segunda vez, en este mismo semestre, se cae la baranda de uno de los miradores del paseo peatonal de Manga; situación que la comunidad atribuye a la falta de control de las autoridades para evitar que la estructura sea usada de manera inapropiada como muelle.

El mirador, situado al lado del Club Náutico, hace parte del mobiliario donado por la empresa Essenttia para embellecer los 500 metros lineales del paseo, que a diario es utilizado por los amantes del ejercicio para hacer caminatas y otras actividades deportivas.
Según el presidente de la junta de acción comunal, Julio Romero, el daño en la estructura fue causado por el mal uso que le están dando algunos lancheros que amarran sus embarcaciones allí.
“Estas estructuras no se hicieron con la finalidad de ser muelles sino de ser miradores, y al darle uso de muelle se abusa de la resistencia que tienen y colapsan”, explicó Romero.

Hace cuatro meses, la baranda de este mismo muelle se cayó por primera vez y Esenttia la reparó, pero ante el continuado abuso del mobiliario se presenta ahora el mismo problema.
La comunidad precisa, además, que son varios los tramos del paseo peatonal que tienen deterioro por lo que urge hacerle mantenimiento a toda el área, en especial a los sitios que reciben olas producidas por embarcaciones que se desplazan en la Bahía a alta velocidad y muy cerca de la orilla.
La remodelación del Paseo Peatonal de Manga se hizo durante la administración de Dionisio Vélez, pero ya urge hacerle un mantenimiento general para evitar que los deterioros sean mayores.