A disposición del Distrito y del Concejo Distrital ya están los “ingredientes” que se requieren para consolidar una política pública de desarrollo productivo en Cartagena. Ahora, más que generar un decreto con los mismos, el reto es que se implementen.
Así lo indicó a El Universal, Erick Behar Villegas, decano de economía de la Universidad Central de Bogotá y exsecretario de Desarrollo Económico de Bogotá, que cooperó con el Centro de Pensamiento de Cartagena de Indias y Bolívar en la construcción y definición de “Lineamientos para una política pública de desarrollo productivo de Cartagena”.
El documento técnico base es el resultado de más de un año de trabajo en busca de cumplir uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): trabajo decente y crecimiento económico. “El año pasado, en el marco de este ODS, realizamos cuatro coloquios con Cámara de Comercio de Cartagena, Observatorio de Mercado Laboral, Universidad de Cartagena, Comisión Regional de Competitividad de Cartagena y Bolívar, Fundación Universitaria Tecnológico Comfenalco, Universidad Tecnológica de Bolívar y Centro de Estudios Económicos Regionales del Banco de la República. En esos coloquios trabajamos cuáles serían los lineamientos que debería tener esa política de desarrollo económico”, aseguró Paola Mercado Afanador, directora Ejecutiva del Centro de Pensamiento.
“Lineamientos para una política pública de desarrollo productivo de Cartagena” fue presentado a la Mesa Directiva del Concejo y llegará al alcalde (e), Pedrito Pereira. Sus gestores esperan que tanto ellos como la sociedad civil se apropien del documento. Pero, cómo se definieron esos lineamientos y cuáles son.
Con base en los insumos adquiridos en los coloquios y en diferentes estudios realizados, en distintos años, se identificaron las principales problemáticas de la ciudad. Estas son algunas de ellas. Behar explicó por qué se debe atacar cada una.
- Residuos sólidos y sostenibilidad ambiental, porque se requiere “implementar tecnologías para quemar basuras y generar energía. Eso funciona en Dinamarca, Suecia, Estados Unidos y Finlandia. La tecnología se inventó hace más de dos décadas”.
- Número desbordado de contratistas en sector público, porque “se contratan a muchas personas. Del 100 % del presupuesto, el 67,4 % se va en financiar personas”.
- Falta de diversificación productiva, porque “el turismo es fundamental. Pero una economía organizada y sólida tiene que buscar depender de más cosas. En Cartagena está la refinería, el comercio, hay muchos insumos para conseguir una economía diversificada y sólida”.
- Falta de articulación, porque “está el sector privado por un lado y el público por otro. Cuando cambian los líderes de uno no se hablan con los del otro porque no hay un entorno permanente de discusión”.
- Desfase en inversión en ciencia, tecnología e innovación, porque “si se invirtiera en transformación productiva para el agro, a través de laboratorios, se podría llegar a la conclusión de qué productos son ideales para hacer sustitución de cultivos”.

El exsecretario de Desarrollo Económico de Bogotá manifestó que, de ser implementados los lineamientos, “hay una responsabilidad y es medir la política pública con indicadores sólidos”.
Indicó cuáles son las recomendaciones que se le hacen al Distrito en el documento. “Una es fortalecer el sistema educativo y su calidad. No solo es cobertura y dar clases, sino ver qué se está enseñando y por qué. ¿Se están dictando clases bilingües en una ciudad turística?”.
Otra: cesar el uso de marcas de gobierno y limitar el gasto en publicidad informativa. “Cada gobierno entrante pone su propia marca, su propio logo. En Bogotá se gastan 91 mil millones de pesos anuales en promocionar la marca de gobierno, cuando solo debe ser Alcaldía de Bogotá con el escudo de armas de la ciudad”, dijo Behar.
Las demás recomendaciones son: activar la red de emprendimiento del Distrito; articular a las entidades del microcrédito con iniciativas pública; impulsar los modelos asociativos de trabajo de las microempresas; establecer una entidad pública o público privada de desarrollo económico autosostenible, para que mueva la política pública; establecer una batería de indicadores, para poder hacerle seguimiento; y empezar a medir la pobreza multidimensional en el Distrito.
A partir de la priorización de 6 de los 17 ODS, el Centro de Pensamiento de Cartagena de Indias y Bolívar trabajó en tres estrategias durante 2018.
Los ODS son: trabajo decente y crecimiento económico; industria, innovación e infraestructura; ciudades y comunidades sostenibles; acción por el clima; seguridad alimentaria y educación. Las estrategias: generación de conocimiento, apropiación social del conocimiento e impacto en política pública.
Paola Mercado Afanador, directora Ejecutiva del Centro de Pensamiento de Cartagena de Indias y Bolívar, resaltó que “desde la generación de conocimiento constituimos el Comité Académico de Cambio Climático. Y gracias a entidades como EPA, Cardique, Acuacar y Reficar, este 2019 se hará el Sistema de Monitoreo Inteligente Ambiental de Cartagena, con dos componentes iniciales, que son: agua y aire”.
Detalló que en el marco de ese proyecto, “con todas las instituciones de educación superior vamos a monitorear estos dos elementos y a establecer políticas a partir de los hallazgos que se tengan”.
Mercado señaló que para impactar en política pública, en 2018 “aportamos a la consolidación del Pacto por Cartagena, celebrado entre la vicepresidenta y el alcalde Pedrito Pereira. A partir de distintos planes, enlistamos las necesidades del territorio y definimos hojas de ruta claras. Con el Distrito, la idea es sacar de ese pacto un plan de acción a 2019. Luego, plantear las prioridades del pacto del 2019 al 2022, y tener esa capacidad de continuar el ejercicio y llevarlo al 2033, que es cuando Cartagena cumple los 500 años de fundación.
“Hemos venido trabajando la visión a 2033, que es una planificación a muy mediano plazo, porque no es a 70 o muchos más años, pero la idea es tener a los 500 años de fundación unos logros y unas victorias importantes, a través de los macroproyectos de ciudad, prioridades que como territorio tenemos que debatir y trabajar, como los ODS”.
Entre los proyectos que necesita la ciudad y el departamentos está trabajar en seguridad alimentaria con el Mecanismo de Acción contra las Hambrunas (FAM, por sus siglas en inglés) de la ONU y el Banco Mundial. Asimismo la participación ciudadana. “El Centro de Pensamiento espera trabajar en una plataforma tecnológica para integrar el territorio a través de las JAC”.
Añadió que “vamos a generar un encuentro de centros de pensamiento de la región Caribe colombiana. Hay en Riohacha, Atlántico, Barranquilla, y queremos ver cómo están los ODS en la región para impactar más en la política pública”.