La falla geológica que removió la tierra en un punto del barrio San Francisco en 2011 dejando alrededor de 1.000 poseedores y 550 propietarios afectados, se convirtió no solo en la tragedia de un día sino en una lucha con el Distrito para efectuar una reubicación.
La Urbanización Lomas de San Francisco desapareció y pasó a ser un terreno olvidado e imposible de volver a habitar.
Aunque el proceso ha sido largo, ayer 40 familias lograron ver materializado el sueño de tener un nuevo hogar luego de que la directora de Corvivienda les hiciera entrega de las llaves de las casas ubicadas en la manzana 72 de Bicentenario.
“Son personas que vivieron esta catástrofe hace ocho años, son cuarenta viviendas para las personas de San Francisco que hoy recibieron sus viviendas dobles para que puedan estar tranquilos en estos espacios”, manifestó Érica Barrios, gerente.
La entrega de viviendas se hizo en compañía de la alcadesa (e) Yolanda Wong y representantes de la Fundación Mario Santodomingo, en total se beneficiaron 92 familias entre las cuales se encontraban desplazados por la violencia y clase trabajadora que participó en los concursos.
Continúa el proceso legal
Hace menos de dos meses, la consejera de Estado, Stella Conto Díaz, declaró improcedente la solicitud de apelación elevada por el Distrito en el proceso que adelantan los damnificados de las casas derribadas en San Francisco. Esto quiere decir que el caso debe ser resuelto en el Tribunal Administrativo de Bolívar.
La apelación es contra la sentencia condenatoria que profirió el Juzgado Trece Administrativo de Cartagena, y que obliga tanto al Distrito como al Ministerio de Vivienda a pagar más de 150 mil millones de pesos, por los daños y perjuicios que sufrieron las familias damnificadas .
