Poco a poco los moradores del barrio Almirante Colón sienten que la tranquilidad que disfrutaban hace 33 años se está desvaneciendo con el auge comercial de su vía principal.
Se trata de una arteria que comunica la Transversal 54 con la calle 14, a cuyos alrededores no sólo desembocan los barrios Los Caracoles, El Campestre y La Fragata, entre otros, sino que también sirve para evacuarse hacia la zona industrial de Mamonal o, en su defecto, a los barrios de la zona suroccidental.
Y son esas facilidades de escape las que atraen a los delincuentes motorizados, quienes a cualquier hora atracan personas o establecimientos comerciales y huyen sin que alguien pueda de tenerlos; asimismo, los habitantes de la calle hacen lo propio siempre que ven algo mal puesto.
Claudia Güete Venencia, la presidenta de la Junta de Acción Comunal, afirma que a estas alturas la comunidad ha organizado unas 18 reuniones con los comandantes de los cuadrantes de los barrios Ceballos y Blas de Lezo, cuyo resultado ha sido la instalación de dos cámaras de seguridad, las cuales los líderes comunales consideran que no son suficientes, “porque solo tenemos una patrulla por cuadrante, de manera que cuando están atendiendo un evento en El Campestre, por ejemplo, Almirante Colón queda sin vigilancia”.
La vía principal también se ha venido convirtiendo en el corazón de los problemas de movilidad que sufre el barrio, sobre todo en las horas pico, por cuanto en ese sector funcionan varios planteles educativos cuyos estudiantes y vehículos escolares hacen colapsar el tránsito.
Los afectados dicen que las señalizaciones no han sido definitivas, puesto que los propietarios de carros toman las calles como parqueaderos en vista de que el barrio carece de espacios que cumplan esa función.
De varias líneas de busetas que pasaban por Almirante Colón solo quedan las de El Campestre, tocándoles a los usuarios caminar hacia la Transversal 54 para tomar un vehículo que los lleve al Centro o a las afueras de la ciudad; o caminar hacia la calle 14 para alcanzar la vía de Mamonal.
De acuerdo con los líderes comunales, una de las consecuencias del poco sentido de pertenencia de sus vecinos es el maltrato al medio ambiente, debido a que la mayoría de los locales comerciales todos los días producen montones de basuras que se acumulan en los andenes, sin una mejor disposición que esperar los días en que pasa el camión recolector.
Como nota agregada, algunas familias arrojan escombros en cualquier zona, caso parecido al de los desechos de mascotas, que pueden encontrarse en los andenes, en las vías peatonales y hasta en los espacios recreativos, pese a las campañas de concienciación.
OTROS PUNTOS
**Con el crecimiento del barrio, en cuanto a ampliación de inmuebles en dos y hasta tres pisos, las etapas primera y tercera sufren con el suministro de agua potable, porque a ciertas horas la presión es demasiado baja y las redes fueron hechas exclusivamente para casas de máximo dos pisos.
**El barrio cuenta con dos colegios públicos y tres privados. No tiene centros médicos, porque los pacientes acuden a la urgencia de la Clínica Blas de Lezo y la Nueva EPS.
**En cuanto a espacios recreativos hay tres: un parque biosaludable donado por la Alcaldía Local 3, otro parque donado por la Gerencia del Espacio Público del Distrito; y un campo de sóftbol que requiere inversión, para que los deportistas jueguen en mejores condiciones y los espectadores se sientan cómodos.
**Casi todas las vías vehiculares están en buen estado. Las peatonales también, pero gracias al mantenimiento que les aplican los residentes.
