“No creo que muchas personas se den cuenta de lo importante que es la inocencia para los inocentes. Mientras ellos sufrían, los verdaderos criminales estaban en libertad y a menudo reincidían. Por este motivo, todos, hasta los más firmes partidarios de los supuestos “colaboradores de la justicia”, aceptan que hoy en Colombia existe un cartel de testigos falsos”.
Con estas palabras, el abogado Luis Gustavo Moreno Rivera inicia la tercera edición del libro ‘El falso testimonio’, en donde hace públicas las historias de las víctimas de falsos testigos judiciales que tuvieron un alto cubrimiento mediático, y explica, con declaraciones de expertos, cómo opera la fábrica de pastorcitos mentirosos en Colombia.
Moreno sostiene que luego de una rigurosa investigación que concentró a profesores internacionales, psicólogos, exfiscales, exmagistrados, investigadores del FBI y periodistas, durante unos tres años, “logramos documentar que hay un ‘cartel de falsos testigos’, pero esos falsos testigos no han sido procesados, ni condenados, pese a que existen pruebas de sus mentiras. Este libro es el inicio para ir detrás de las empresas y los empresarios de los falsos testimonios que producen resultados en los procesos judiciales”.
Historias que se convirtieron en un espectáculo, como las acontecidas al almirante (r) Gabriel Arango Bacci, el exdiputado Sigifredo López Tobón, la exsenadora Nancy Patricia Gutiérrez Castañeda, el congresista Carlos García Orjuela y otras víctimas de mentiras fabricadas, son compiladas en el libro que a partir de la próxima semana estará disponible en todas las librerías del país.
“En todos estos casos hay un eje temático: la justicia determinó que en ellos existieron pastorcitos mentirosos, pinochos que engañaron a la justicia, y como consecuencia de esas declaraciones ellos duraron un tiempo insólito privados de su libertad, dignidad y familia”, afirmó el experto en derecho probatorio y penal, quien arribó a Cartagena el pasado jueves para presentar su más reciente obra.
LAS VÍCTIMAS ALZAN SU VOZEl almirante (r) Gabriel Arango Bacci, quien estuvo privado de su libertad durante 18 meses acusado de haber tenido relaciones con el narcotráfico, contó que “afortunadamente ya terminó este calvario. Salí libre en diciembre de 2009, pero eso se va llevando y trata de destruir la vida de uno”.
Resaltó que “tanta fue mi lucha y demostración, que Procuraduría y Fiscalía pidieron la absolución de mi proceso ante la Corte Suprema de Justicia. Eso quiere decir de que la justicia está pasando por unos momentos críticos y difíciles, porque yo tuve un fiscal cuya actuación dejaba mucho que desear (…) afortunadamente hubo un cambio de fiscal y el que llegó se dio cuenta de la infamia que estaban cometiendo en mi contra”.
Arango señaló que “la sociedad civil debe tener el valor de denunciar a los fiscales, jueces y a todos los operadores judiciales que sean corruptos. Hay que delatarlos para que esto no continúe”.
Así mismo, Angélica Ramírez, reconocida presentadora y periodista de televisión en el departamento de Huila, que fue recluida en un establecimiento carcelario por más de cuatro años acusada de ser colaboradora de las Farc, aseguró que no se quedará callada y demandará al Estado por su injusto encierro.
“Ya estamos junto a mis abogados preparando la demanda en contra del Estado porque pienso que definitivamente no nos podemos quedar callados. Tenemos que salir, luchar, hablar, denunciar. No podemos permitir que esto siga pasando, porque hoy lo hicieron conmigo, mañana puede ser cualquier persona que ahora está en casa”, dijo Ramírez.
La víctima de falsas acusaciones, quien ahora trabaja por los Derechos Humanos de la población carcelaria, anotó que no podemos ser indiferentes frente a las personas afectadas por falsos testimonios y/o falsos positivos. “A los que están aún en las cárceles siempre les digo que no podemos dejarnos manipular por esas personas que quieren simplemente presentar positivos ante todo un país (…) Si somos inocentes tenemos que luchar por nuestra inocencia hasta el último día que Dios nos lo permita”.
COLOMBIANOS DUDAN DE LA JUSTICIAEn uno de los apartes de ‘El falso testimonio’, se presentan los resultados de una encuesta contratada por la línea de investigación Luigi Ferrajoli, y desarrollada por Investigaciones y Datos Colombia Global Group.
A través de llamadas telefónicas, 10 mil personas mayores de 18 años residentes en Bogotá, Barranquilla, Medellín, Cali, Cartagena, Ibagué y otras cuatro ciudades, respondieron a las siguientes preguntas: ¿Cree usted en la justicia colombiana?, ¿cree en la existencia de falsos testigos?, ¿cree que puede ser víctima de falsos testigos?, y ¿alguien cercano a usted o usted ha sido víctima de falsos testigos?
Según los resultados de esta encuesta, el 61% de los consultados no cree en la justicia colombiana, sin embargo, el 39% aún cree. Respecto a la existencia de falsos testigos, el 81% admitió que si cree, mientras que el 19% no cree.
Además, el 73% de los encuestados respondió que si cree que puede ser víctima de falsos testigos, no obstante, el 27% no lo cree. Finalmente, el 82% sostuvo que no ha sido víctima de falsos testigos y el 18% restante que ha sido víctima o tiene alguien cercano que ha sido víctima.
“Eso significa que no hay confianza, sino hay confianza ha habido una pérdida de legitimidad y credibilidad en las instituciones colombianas, y sin duda se debe a la constante repetición de falsos positivos judiciales, fiscales e investigadores corruptos (...) y todas aquellas fallas que hay que corregir en la justicia colombiana, para que los colombianos se sientan tranquilos y a la hora de enfrentar un proceso sientan que va a haber justicia”, precisó el exdiputado de la Asamblea de Valle del Cauca, Sigifredo López Tobón, quien por falsos testimonios fue acusado como coautor del secuestro y homicidio de sus once compañeros de cautiverio, detenidos por las Farc el 11 de abril del 2002.
El exsecuestrado, quien estuvo privado de su libertad durante 90 días, afirmó que se tienen que endurecer las penas a los jueces, fiscales e investigadores que utilicen falsos testigos y fallen en contra de las pruebas, pero también a los falsos testigos.
“Yo planteo que debe ser una pena no inferior a la mitad de la pena establecida para el delito que ellos querían para su víctima (...) porque ahora la pena es de cuatro años y si se acoge termina pagando un año. Entonces necesitamos penas más severas para quienes cometan el delito de falso testimonio, fraude procesal y para los que instrumentalizan la justicia con propósitos criminales”, explicó López.
El almirante (r) Arango aseveró que “si no hay credibilidad del ciudadano común y corriente en la justicia nunca vamos a tener paz. Tenemos que luchar para que este problema, este cáncer llamado ‘cartel de falsos testigos’, se acabe a como dé lugar. Hay mucha gente que tiene terror, pánico a caer en la Fiscalía, porque esta entidad ha sido una de las promotoras de los testigos falsos”.
El autor del ‘Falso Testimonio’ puntualizó que para comenzar a erradicar este cáncer, “hay que prohibir los beneficios penitenciarios y punitivos, las rebajas de penas y el principio de oportunidad a las personas que se tienen como falsos testigos. Hoy curiosamente, a varios de los que han mentido a la justicia, se les está ofreciendo principio de oportunidad para que sigan colaborando en varios procesos. Eso es insólito, rompe con la lógica y la razón”.
Moreno envió un mensaje a los juristas del país. “La verdad no desciende como el trueno en una tormenta, la verdad se obtiene con inteligencia, investigación y devoción. Eso es lo que le falta a este país y a la justicia colombiana, investigar”.




