Desde que la ciudad acogió el modelo de libre competencia para recoger las basuras, el pasado 1 de julio, Aseo Urbano de la Costa dice hacer esfuerzos de inversión y trabajo social para consolidar un servicio de calidad a sus usuarios.
Renovar la flota de camiones recolectores de residuos, ratificar la prestación de su servicio a las comunidades de estrato 1 y de la zona insular, y lograr un cambio de cultura ciudadana en cuanto a arrojar basuras, son algunos de los compromisos adquiridos por dicho consorcio, según explicó Augusto Mainero Román, gerente de Aseo Urbano de la Costa.
“Nos comprometimos a renovar la flota y hoy tenemos casi el 100% renovada. Solo faltan dos vehículos que están en el puerto, y una vez salgan quedan como supernumerarios carros nuevos”, dijo Mainero. Lea aquí (Nueva flota de camiones recolectores de basura llegan a Cartagena)
Señaló que para evitar preocupaciones, la empresa informó a sus usuarios de estrato 1 que continuaría siendo responsable de la recolección de sus residuos, así como de los que se generan en la zona insular, pese a que esta “tiene un sobrecosto muy alto frente al servicio normal”.
Mainero afirmó que para cambiar el comportamiento de los cartageneros frente al arrojo de basuras en espacios públicos, el equipo de la Corporación Visionarios de Colombia, entidad liderada por Antanas Mockus, “diagnosticó por qué la gente saca los residuos todo el tiempo sin respetar los horarios de las frecuencias y por qué existen los basureros satélites”.
La Corporación se comprometió a entregar dicho informe y a presentar soluciones a las problemáticas encontradas antes de que se termine el mes.
BASUREROS ERRADICADOSMainero aseveró que de los 26 basureros satélites o sitios de arrojo clandestino identificados por Aseo Urbano, 14 desaparecieron de manera radical, ya que desde el 18 de julio, dos rutas especiales (conformadas por dos volquetas y un minicargador) están dedicadas a recoger los residuos que se acumulan allí.
Anotó que esta creciente aglomeración de basuras “era mi dolor de cabeza”, pues cuando la recolección de residuos operaba bajo el modelo de Áreas de Servicio Exclusivo (ASE), los consorcios de aseo necesitaban un permiso del Distrito para recoger dichos basureros. Este trámite podía tardar hasta 10 días y “cuando íbamos a recogerla había el doble de basura”.
Los basureros erradicados, entre ellos uno en el barrio Martínez Martelo, frente al establecimiento Joaquín Rey, “seguirán incluidos en la ruta, pero ya no con dedicación diaria sino con una frecuencia en función del resultado”, agregó Mainero.
Un promedio de 15.500 toneladas de basura son recogidas cada mes por Aseo Urbano.
CAJAS ESTACIONARIAS Y CONTENEDORESPara la correcta disposición de escombros y podas u otros residuos en diversos puntos de la ciudad, las empresas Pacaribe y Aseo Urbano se comprometieron a instalar cajas grandes especiales de hasta 15 metros cúbicos y cajas pequeñas para material compactable, en sitios estratégicos.
El frente de Almagrario, la ESE de El Campestre y una esquina de Ceballos, son algunos de los puntos donde hay cajas estacionarias acompañadas de vigías ambientales que invitan a los carromuleros a depositar adentro los residuos.
“Eso nos ha dado un excelente resultado (…) En la ESE de El Campestre somos amigos de los carromuleros de la zona. Acabamos con una guerra que no daba resultados y ellos siguen facturando. Casi que vamos a tener estaciones de transferencia de residuos en diferentes sitios de la ciudad”, manifestó el Gerente de Aseo Urbano de la Costa.
En cuanto a los contenedores, aseveró que “tenemos casi 1000 contenedores repartidos por la ciudad en sitios privados porque en públicos por mi zona no me he atrevido. Se pueden perder o destruir y son contenedores que valen de 800 a 900 mil pesos”.
Mainero destacó que “con apoyo del Alcalde vamos a instalar dos contenedores por manzana en Los Corales, para que la gente deposite la basura el día que quiera hasta que se pase a recoger”.
De ser exitosa, esta metodología de contenerización, que en principio estará acompañada de trabajo social, abrirá paso a que la ciudad recoja sus residuos como se hace en los países desarrollados.
El Gerente enfatizó en que pese a las libertades que ofrece el modelo de libre competencia, “no quiero pensar en zonas distintas a mi zona inicial hasta que no esté 100% seguro de que presto el mejor servicio posible en la que tenemos. Apenas consolidemos el servicio miraremos otros mercados porque nuestro objetivo es crecer”.


