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Cartagena

Más de 50 estudiantes no pudieron ingresar a clases en la IE Mercedes Ábrego

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“Por un inconveniente llegué a las 6:35 (de la mañana) y la puerta ya estaba cerrada. Dicen que traigan a los papás, pero hay unos que ya han salido y están trabajando”, comenta uno de los más de 50 alumnos que no pudieron ingresar a la Institución Educativa Mercedes Ábrego, sede San Fernado, porque llegaron después de la hora de entrada.

De acuerdo con la coordinadora Nancy Luna, la hora de ingreso a la institución es de 6:20 a 6:30 a.m., pero los estudiantes llegaron después de esa hora, por lo que se les devolvió para sus casas y se les dijo que debían regresar con un acudiente.

“A los padres de familia se les ha hecho una reunión y se les ha recalcado el cumplimiento del horario. La obligación del padre de familia es que si el niño viene tarde, él lo trae y entra sin ningún problema, se le hace un récord al alumno y el padre sabe que debe mejorar en ese aspecto”, comenta la coordinadora.

Los estudiantes señalan que solo llegaron pocos minutos después de la hora estipulada y que “es un peligro porque si uno de estos muchachos se devuelve y le pasa algo, quién responde”.

Dicen que en estos casos deberían dejarlos entrar a la institución, firmar un acta y hacerlos esperar la primera hora, “pero ya ni siquiera hacen eso. En seguida van es devolviendo, lo cual es un peligro y significa un día de clase perdido”.

De acuerdo con lo relatado por una estudiante, no es la primera vez que esto ocurre. “Siempre que llegamos tarde no nos dejan entrar, así lleguemos dos minutos más tarde. Ella (la coordinadora) dijo que llegáramos a la hora que es, pero no siempre podemos”.

EN EL 2013

De acuerdo con la coordinadora Nancy Luna, el año pasado se permitía que entraran incluso 10 minutos después, es decir hasta las 6:40 a.m., pero esta medida fue modificada debido a que perturbaba el desarrollo de las clases de los que sí habían llegado a tiempo.

Luna señala que desde los últimos meses del periodo académico del 2013 se enfatizó en que la entrada era hasta las 6:30 a.m. Añade que este año se hizo una reunión con los padres y todos los días se les decía a los estudiantes sobre la puntualidad.

Algunos de los alumnos se quedaron afuera esperando un cambio de opinión de la coordinadora, otros regresaron con sus padres, quienes llegaron disgustados porque sus hijos no habían llegado tan retrasados. JULIO CASTAÑO - EL UNIVERSAL
Algunos de los alumnos se quedaron afuera esperando un cambio de opinión de la coordinadora, otros regresaron con sus padres, quienes llegaron disgustados porque sus hijos no habían llegado tan retrasados. JULIO CASTAÑO - EL UNIVERSAL
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