Las administraciones de los clubes y propiedades horizontales de Bocagrande, Castillo y El Laguito deben estar preparadas para demostrar que cumplen con la Ley 1209 de julio 14 de 2008 (o Ley Espitia), que establece normas de seguridad en piscinas (Lea: Entró en vigencia ley de piscinas).
El Gobierno Distrital a través del Programa de Mecanismos de Control de la Secretaría del Interior, en conjunto con el Departamento Administrativo Distrital de Salud (Dadis) están corroborando si las piscinas están funcionando de conformidad con los estatutos sobre el tema.
Según la norma, los distritos y municipios tienen la responsabilidad de verificar aspectos en materia de seguridad tales como planos, formas de los estanques, profundidad, escaleras, drenajes, corredores, periodo de recirculación del agua, plan de saneamiento básico y de emergencia de la piscina, servicio de salvavidas, primeros auxilios, entre otros aspectos importantes (Lea: Capacitación y socialización de normas de seguridad en piscinas).
REVISIONES
Respecto a las medidas de higiene en piscinas, la norma establece para estos escenarios recreativos hacer inspecciones periódicas que confirmen las buenas prácticas sanitarias del agua contenida en el estanque de la piscina, en las áreas complementarias y en instalaciones anexas.
En concordancia con esto, el Dadis realizó un censo de piscinas y ha venido socializando la norma a fin de ejercer un control más riguroso sobre el funcionamiento de las piscinas.
“Hay que estar más pendientes porque en Cartagena por su condición turística todos los días se construye una nueva piscina. Existen más de 360 piscinas ya que en todo conjunto residencial que se construye o edificio lo que está de moda es la piscina”, dijo Galvis Gaviria, funcionario del Dadis.
Las inspecciones realizadas por el Distrito buscan evitar problemas de salud, e impedir accidentes para salvaguardar la vida e integridad de los bañistas.
EN LA ZONA TURÍSTICA
Las administraciones de los edificios están enteradas de las inspecciones que viene haciendo el Dadis con el tema de piscinas, dijo Álvaro Barreto, administrador de varios edificios residenciales.
El año pasado funcionarios del Dadis nos visitaron e hicieron un informe técnico de lo que se debía reajustar (Lea: Piscinas cumplen en 70% las medidas de seguridad).
“Lo más común es la falta de planos informativos visibles a los bañistas, la falta de mecanismos para impedir el acceso de niños a la piscina de adultos y la señalización de las profundidades de los estanques”, añadió Barreto.
Las administraciones de los edificios saben que sobre ellos recae esta responsabilidad, por eso es de su interés estar siempre vigilantes de que el personal de servicios generales cumplan con su parte.
“Tenemos que estar pendientes de que se cumpla la norma en cuanto a seguridad e higiene, y periódicamente recibimos visitas del Dadis que nos reajustan las medidas”, expreso Enilce Luna, administradora de edificios en El Laguito y Bocagrande.
REQUISITOS
Para la construcción de una piscina es necesario presentar ante la Secretaría de Planeación Distrital los planos de dicha obra, realizados por un ingeniero.
En la documentación aportada se deben consignar todas las especificaciones técnicas: tamaño, cantidad de agua, profundidad, tipo de máquinas a utilizar, entre otros.
Cuando la piscina está construida, la Secretaría del Interior realiza la debida vigilancia para determinar si se ajusta a los parámetros, y la autoridad de salud determina si reúne los requisitos sanitarios establecidos.
LAS NORMAS
Los usuarios deben conocer las rutas de evacuación de agua en la piscina, desniveles, la pendiente del piso y las profundidades.
Las piscinas deben exhibir de manera visible los planos informativos y técnicos.
En cuanto a las profundidades mínima, máxima e intermedia, deben estar demarcadas en los costados, bordes y pisos del lugar donde está la piscina.
El corredor de la piscina debe tener mínimo 1,20 metros de ancho, recubierto con material deslizante.
Es obligatorio que el bañista use la ducha antes de ingresar a la piscina.
Las mascotas están prohibidas.
Debe contar con equipos de salvamento y un piscinero (salvavidas), que obviamente sepa nadar y tenga conocimientos de primeros auxilios.
La piscina debe permanecer cerrada cuando no esté en uso, para evitar que ingresen las personas, especialmente menores de edad.
Debe tener a su alrededor unas barreras o estructuras de aislamiento para evitar que alguna persona en tragos pueda caer en el agua.
