Ojalá que el Distrito aplique las normas vigentes a todos aquellos que siguen arrojando escombros y basuras en el primer lote que encuentren. También sería bueno que los consorcios de aseo revisen las tarifas que cobran por botar podas y escombros. Sólo así se ayudaría a la ciudad. ÓSCAR DÍAZ ACOSTA - EL UNIVERSAL -