Buscando generar conciencia sobre la necesidad de preservar las abejas, se hizo el Primer Foro Cada Abeja Cuenta, con expertos en el tema para dar a conocer la importancia de este pequeño insecto, así como proporcionar herramientas y recomendaciones que ayuden a su preservación y mantener el equilibrio del medio ambiente.
Los expertos hablaron de la importancia de las abejas, y la charla de Germán Perilla, profesor de George Mason University, se trató sobre el éxito de Honey Bee Iniciative en Colombia.
Las abejas fueron declaradas como el ser vivo más importante del planeta por el Instituto Earthwatch. Su importancia radica en que cerca de un 70% de la agricultura del mundo depende de las abejas, gracias al proceso de polinización que permite a las plantas reproducirse.
El profesor Germán Perilla habla de la importancia de este foro y lo vital que es proteger a las abejas.
¿Cómo va el proceso educativo en Colombia?
- Es un proceso que debe ser mundial. En este momento los polinizadores en el mundo están en crisis, la cual se inició en 2006 con el colapso de la colmena en los países desarrollados por unos insecticidas que aparecieron en los noventa. Cuando las abejas realizaban su ejercicio de polinización, tomaban ese néctar y polen infectado que les daña el cerebro a la abeja y se pierden, no vuelven a la colmena.
Es uno de los muchos problemas que tienen las abejas. De la globalización nadie se escapa y las abejas también se habían visto afectadas, porque unas plagas que pertenecían a ciertas partes del mundo, ahora están en todas partes.
¿Qué se debe saber de las abejas?
- Se debe saber que cuando hablamos de abejas, no sólo nos referimos a las que producen miel, pues tenemos 20 mil especies. Es un concepto que tiene que cambiar, porque lo más importante de la abeja, no es la producción de miel, es la seguridad alimentaria a través de los procesos de polinización.
Un tercio de la comida que consumimos los humanos es directamente polinizada por las abejas. Si colapsan los polinizadores, la próxima pandemia será de hambre.
¿Cómo vienen trabajando en Colombia?
- En el 2012 creamos el Honey Bee Iniciative para generar conciencia sobre la importancia de las abejas y los polinizadores. En 2017 se inició este programa en Socorro, Santander. Hoy en día, ya llegamos a doce municipios y 220 familias, más cuatro colegios de la región.
Se trata de generar un movimiento comunal en donde la gente entienda la importancia de las abejas, cómo manejar su sostenibilidad y a la vez productivos, con un énfasis especial en la mujer.
¿Con qué tipo de abejas trabajan?
- Arrancamos con las abejas sin aguijón, que se conocen como las angelitas, que son inofensivas, que se pueden tener en la casa y producen miel que es muy costosa.
Son inofensivas, hacen mucha menos miel que otras, pero es una miel medicinal, que se usa para el terigio (un problema en los ojos).
Buscamos generar programas en los cuales nosotros nos adaptemos a la comunidad, en que ellos sean toda la cadena, en una economía circular.
¿Hay muchos mitos en torno a las abejas?
- Los mitos en torno a las abejas fueron unos de los retos más grandes del programa. Teníamos que acabar con los mitos y hablar una misma lengua: apícola.
Cada cual maneja las abejas como aprendió a manejarlas, pero se crean mitos, se crean vicios que no son productivos, por lo que fue largo el trabajo con la comunidad, respetando su cultura.
Encontramos que se alimentaban las abejas de una manera incorrecta al partir el nido, que se suele hacer en tiempo de invierno.
¿Extenderán el foro a otras regiones del país?
- Esa es la idea. El programa es financiado por BBVA, y esa es una de las exigencias. Para este año, la idea es comenzar con Sucre, que tiene una alta producción de miel, para integrarlo de una manera más técnica, siendo un gremio bastante grande.