Japón prevé proponer una reducción del 50% de las capturas de atún rojo alevín en el Pacífico, un paso histórico anunciado este martes por la Agencia japonesa de pesca para preservar esta especie en peligro.
"Tomamos esta iniciativa para proteger el atún rojo, uno de los principales recursos en las aguas que rodean el país", declaró este martes Masanori Miyahara, presidente de esta agencia gubernamental, durante una reunión en Tokio. El archipiélago, primer consumidor mundial de atún rojo, era reticente hasta hace poco a cualquier reducción drástica de las cuotas, a pesar de las reiteradas advertencias de los científicos sobre la peligrosa reducción de las reservas. Las naciones de Asia-Pacífico -entre ellas Japón-, Estados Unidos, China y Corea del Sur, decidieron el año pasado durante una reunión de la Comisión de Pescas del Pacífico Occidental y Central (WCPFC) acordaron reducir un 15% las capturas de atunes rojos de tres años o menos, respecto a la media de capturas entre 2002 y 2004. Pero los pescadores japoneses consideran que esta medida es insuficiente para permitir la recuperación de las reservas de atún, por lo que propondrán a los miembros de la Comisión, en una reunión en septiembre, que adopten a partir de 2015 un plan de 10 años para reducir a la mitad la captura de atunes alevines (los de menos de 30 kilos), hasta unas 4.000 toneladas al año. Tokio también propondrá, con el fin de evitar la sobrepesca, que se establezca un sistema de alertas progresivas que avisen a los pescadores locales cuándo se estén acercando al límite de capturas permitido.
